Zaragoza.- La obra 'Tesorina' del Centro Dramático de Aragón llega este fin de semana a Ejea de los Caballeros y Utebo

Actualizado: sábado, 9 diciembre 2006 18:54

ZARAGOZA, 9 Dic. (EUROPA PRESS) -

La obra teatral 'Tesorina', del Centro Dramático de Aragón, sigue su itinerario por tierras aragonesas y llega este fin de semana a las localidades zaragozanas de Utebo, donde se representará hoy, y Ejea de los Caballeros, municipio al que llegará mañana domingo, 10 de diciembre.

Esta comedia renacentista de corte celestinesco, escrita por el autor aragonés Jaime de Huete, es la última producción del Centro Dramático de Aragón que, antes de presentarse en los escenarios zaragozanos del Teatro Principal, se rodará en otros muchos como el Teatro Municipal 'Miguel Fleta' de Utebo (20,00 horas de hoy) y el Teatro de la Villa de Ejea (19,00 horas, mañana domingo).

Adaptada y dirigida por Mariano Cariñena, la comedia habla de los amores de un caballero, Tesorino, y de una dama, Lucina, que pese a las dificultades iniciales alcanzan con su boda un final feliz. Esta historia de amor central se completa con la presencia de los amoríos secundarios en el mundo de los criados, como los que viven Giliracho y Citeria, Pinedo y Citeria, y Margarita y Giliracho.

Con estos cruces de relaciones amorosas, la presencia celestinesca es obvia, aunque con la singularidad de que su actividad es ejercida por un fraile, confesor de la heroína de la obra.

Siguiendo la línea de la lírica y de la novela sentimental, los personajes aparecen con frecuencia como dolientes y tristes amadores, por lo que, en principio, se podría esperar encontrar debajo de tantas quejas por amor, llantos, suspiros y declaraciones de fe y servicios, heridas sangrantes, requiebros, enajenaciones, amenazas de muerte y suicidio, alguna huella que no fuese sólo retórica de las corrientes neoplatonizantes en boga en la Europa del Renacimiento.

No es así, sino que normalmente el amor significa en esta obra el placer de los sentidos, como sucede en la comedia clásica y en la italiana. Y si algo que une a los personajes mas representativos del primer Renacimiento es su carnalidad, la cual se manifiesta en todos ellos sin distinción de condición ni clase social.

Respecto a la producción, se trata de una propuesta de gran formato, con 11 excelentes actores aragoneses en escena. La obra discurre bajo la dirección de Mariano Cariñena, una de las grandes personalidades del Teatro aragonés, que en los años 70 descubrió esta obra y la puso por primera vez en escena.