Zaragoza.- La profesora Carmen Gómez recupera el espíritu de la capital aragonesa en el Renacimiento en una publicación

Actualizado: jueves, 4 diciembre 2008 20:18

ZARAGOZA, 4 Dic. (EUROPA PRESS) -

La profesora titular del Departamento de Historia del Arte de la Universidad de Zaragoza, Carmen Gómez, recupera en 'Zaragoza y los Palacios del Renacimiento' el espíritu de la capital aragonesa durante aquella época, en la que la ciudad vivió una etapa de esplendor. El volumen, presentado esta tarde en el Museo Ibercaja Camón Aznar, es el número 100 de la Colección Cuadernos Histórico-Artísticos de Ibercaja.

En declaraciones a Europa Press, Carmen Gómez detalló que con este trabajo pretende dar continuidad "a la exaltación" que se ha vivido en Zaragoza este verano con motivo de la celebración de la Exposición Internacional y recupera, además, un tema al que ha dedicado gran parte de su vida.

De hecho, la Zaragoza del Renacimiento fue el objeto de su tesis doctoral en 1985, de modo que este nuevo trabajo es fruto de "un proceso de maduración" y esta era "una ocasión estupenda para completar" esa labor.

El Renacimiento fue, en su opinión, una época "estrella" para la ciudad, dado que entonces vivió "los mejores momentos de su historia", al ser el centro político de España y una de las ciudades más relevantes del Mediterráneo y de Europa, una etapa "dorada" que la capital ha conseguido repetir este verano.

Así, la obra hace un recorrido por la capital aragonesa en la época del Renacimiento, centrándose en los palacios y realizando un detallado estudio de la arquitectura de ese periodo histórico.

Carmen Gómez realiza en este cuaderno una detallada descripción de Zaragoza y su transformación en el Renacimiento. En él se describen diferentes aspectos de la ciudad en ese momento como la configuración del espacio, las casas de la ciudad según las formas, las funciones, y la moda y se realiza una detallada descripción de los palacios zaragozanos conservados y de casas desaparecidas.

En el libro se describen importantes edificios arquitectónicos como las casas de Miguel Torrero; de Huarte, en la calle Dormer; de Miguel Donlope; la casa de los Pardo, actual sede del Museo Ibercaja Camón Aznar; la casa de los Morlanes; la casa del conde de Morata, y la casa del conde Sástago, entre otras.

También de algunas desaparecidas, como las de Climent, de Coloma, de Gabriel Zaporta; Los textos se acompañan de numerosas fotografías y dibujos antiguos de planos y perspectivas de los edificios.

Esta publicación es el número 100 de la colección de Cuadernos histórico-artísticos que inició su andadura en 1967 con un primer volumen sobre Teruel. Con este número se termina la colección, que ha tratado sobre el patrimonio, la historia o los atractivos turísticos de diversas localidades del ámbito de actuación de la Caja.

A lo largo de estos 41 años se han publicado 18 cuadernillos de la zona de Teruel, 28 de Huesca, 23 de Zaragoza, 10 de La Rioja, 12 de Guadalajara, dos de Lérida, dos de Navarra, y uno de Burgos, Soria, Tarragona, Madrid, Castellón, Cáceres, Asturias y Jaén. Algunos de los temas abordados han sido la nieve en el Pirineo Oscense o en el Valle de Tena, la arqueología en Guadalajara o este último sobre Zaragoza y los palacios del Renacimiento.

CARMEN GÓMEZ URDÁÑEZ

Carmen Gómez es profesora titular del Departamento de Historia del Arte de la Universidad de Zaragoza. Además de varias publicaciones didácticas fruto de su trabajo en las aulas, como su 'Historia del Arte del Mundo Clásico' (de la editorial Planeta) o 'Historia del Arte de Próximo Oriente' (Historia 16), otras avalan su conocimiento de una época algo más cercana: la del Renacimiento.

Especialmente se ha dedicado con preferencia a la arquitectura y el urbanismo de este último período, desde que hace ya muchos años escribiera la que fue su tesis doctoral: la arquitectura civil de Zaragoza en el siglo XVI.

Un capítulo de esta tesis --agotada hace tiempo-- lo dedicó al este palacio renacentista de los Pardo, actual Museo Ibercaja Camón Aznar. En otro de ellos explicó el conjunto de la ciudad, que era considerada por quienes venían de fuera, de Italia incluso, y de Florencia, la mejor de España por su caserío, y también una de las mejores de Europa.

Junto al análisis artístico o formal de los edificios, ha investigado en los aspectos socioeconómicos, laborales y técnicos de la arquitectura. Los materiales, las prácticas constructivas, el desarrollo del trabajo y la jerarquía en las obras han sido objeto de su estudio en sucesivas publicaciones.

Dentro de estas cuestiones, ha dedicado una atención particular a la importante participación de los mudéjares y los moriscos en el trabajo de la construcción y a las tradiciones islámicas en la arquitectura. Destacan sus aportaciones sobre las cofradías profesionales de los maestros de obras, tanto del colectivo cristiano como del mudéjar, del que ha podido analizar las únicas ordenanzas gremiales conocidas hasta el momento en España.

Ha estudiado también la regulación municipal de los oficios implicados en las obras, y el control que el Concejo ejercía sobre el ámbito de la construcción. La profundización es estos aspectos le ha llevado a precisar las ideas generales que la tradición historiográfica ha venido ofreciendo acerca de la configuración del "arquitecto" a la vitrubiana.

Más recientemente ha complementado esta experiencia documental y bibliográfica con otra en el ámbito universitario. Desde hace más de doce años forma parte del Equipo de restauración de la catedral de Tarazona (Zaragoza), sujeta a un complejo y elaborado Plan Director.

Algunas de sus últimas publicaciones tienen que ver con este trabajo en la catedral de Santa María de la Huerta en obras, y otras están en ciernes. Además, en estos momentos dirige un equipo de investigación interdisciplinar para desarrollar un proyecto I+D+i financiado por el Ministerio que se centra en el estudio de los revestimientos cromáticos como acabado de la arquitectura histórica.