Sólo las empresas de generación eléctrica y las empresas de cemento incrementaron sus emisiones, según el Principado
OVIEDO, 2 Abr. (EUROPA PRESS) -
Asturias cerró el primer periodo del Plan Nacional de Asignaciones 2005-2007 con una reducción del 3,46 por ciento de las emisiones de gases de efecto invernadero hasta situarse el pasado año en 25.246.191 toneladas de CO2. El 76 por ciento de las emisiones fueron realizadas por las empresas sometidas en el mercado a los derechos de emisión mientras que el resto de los sectores, denominados difusos, representaron aproximadamente el 24 por ciento, según informaron fuentes del Principado a través de una nota de prensa.
Todos los sectores de actividad, salvo los de generación eléctrica y cemento, pudieron cubrir sus previsiones con la asignación gratuita de los derechos de emisión. Estos resultados permitieron al Principado mantenerse entre las autonomías españolas donde menos crecieron las emisiones de CO2 respecto del año base, que es 1990. Mientras que en este periodo de tiempo, el comprendido entre 1990 y 2007, Asturias experimentó un incremento de las emisiones del 21 por ciento, en el conjunto de España crecieron en un 52 por ciento.
Estas son las principales conclusiones del Plan Nacional de Asignación 2005-2007 en Asturias, que supone el primer periodo de funcionamiento del sistema adoptado en la Convención Marco de Naciones Unidas para el Cambio Climático, más conocido como Protocolo de Kioto.
Estas cifras responden a la validación realizada en el Registro Nacional de Derechos de Emisión de Gases de Efecto Invernadero (Renade), realizada el pasado 31 de marzo. En el caso asturiano, esta verificación de emisiones de las empresas sometidas al régimen de derechos de emisión ha sido realizada por la Oficina para la Sostenibilidad, el Cambio Climático y la Participación (OSCCP), dirigida por Nieves Roqueñí y dependiente de la Consejería de Medio Ambiente y Desarrollo Rural del Principado de Asturias.
Según los datos que maneja la citada Oficina, los sectores incluidos en el Plan Nacional de Asignaciones 2005-2007 emitieron en 2007 un total de 25.246.191 toneladas de CO2, frente a los 26.151.887 del año 2005. Con estas estadísticas, la Oficina asturiana considera que el objetivo del Plan Nacional de Asignaciones de frenar las emisiones en el citado periodo "se ha conseguido e incluso superado en Asturias", puesto que se observa un cambio de tendencia al producirse una disminución global del 2,1 por ciento para todo el periodo.
En 2007, sólo el sector eléctrico asturiano y los de la cal y el cemento aumentaron sus emisiones de CO2. Según explicó Roqueñí en un comunicado, esta tendencia al alza en el caso del sector cementero se explica en el incremento de la capacidad de producción de Aboño y en los ajustes del programa de producción. En cuanto al sector de generación eléctrica, el aumento de las emisiones de gases de efecto invernadero del año 2007 se deben al mayor número de horas de funcionamiento de las centrales térmicas de carbón, como consecuencia de la subida de precios del gas y la menor tasa de energías renovables en el panorama energético nacional. "Esta circunstancia demuestra que el carbón sigue siendo una garantía de suministro en la generación eléctrica a nivel nacional", matizó Roqueñí.
Según la directora de la Oficina para la Sostenibilidad, el Cambio Climático y la Participación, las perspectivas de futuro son "optimistas". Roqueñí asegura que el nuevo Plan de Asignación, de modo general, se ha ajustado a los derechos de emisión que han declarado las empresas, a las que considera "preparadas para hacer frente a este nuevo reto".
