OVIEDO, 27 Feb. (EUROPA PRESS) -
El Grupo Capio Sanidad apuntó hoy que "el que Elena Arias siguiera apareciendo como apoderada o fuera nombrada de nuevo apoderada de alguna empresa del Grupo Capio, cuando ya ocupaba su actual cargo de Gerente del Servicio de Salud del Principado de Asturias se debe únicamente a un error material que, la propia interesada no tiene por qué conocer y que, en ningún caso, es atribuible a la propia Elena Arias".
Además, el Grupo Capio apuntó en un comunicado, que revisa este tipo de apoderamientos "a título general y no a título particular cada cierto tiempo por lo que es probable que Elena Arias Menéndez siguiera siendo apoderada de la empresa después de haber abandonado la misma". "Esto es debido a que el apoderamiento dependía de una vinculación laboral con la compañía y, en consecuencia, una vez que esta quedó extinguida, carece de todo valor", sostiene la compañía.
Así lo manifestó la empresa, ante las denuncias que están apareciendo en los medios de comunicación asturianos sobre la "relación" de la Gerente del Servicio de Salud del Principado de Asturias (Sespa), Elena Arias, y el Grupo Capio Sanidad. El Grupo reiteró también la postura trasmitida ayer por la compañía remitiendo el contenido del certificado presentado ayer por Arias para clarificar que no mantiene relación con la compañía desde 2007. Así, volvió a apuntar que Elena Arias fue directora de Recursos Humanos del Grupo Sanitario IDC (ahora Capio Sanidad) desde el año 2001 hasta el año 2007. "Elena Arias causó baja en la empresa por voluntad propia en octubre de 2007", afirma la compañía resaltando que "a partir de esta fecha no ha mantenido ninguna relación profesional o de otro tipo con el Grupo Capio".
También reseñó que Arias, durante su etapa profesional en el Grupo Capio, "no tuvo ningún tipo de interés económico en la sociedad (acciones, participaciones o similar)" y que como responsable del departamento de Recursos Humanos "tuvo un apoderamiento específico, que le permitía actuar en nombre de la empresa únicamente en las áreas de su cometido de responsable de Recursos Humanos".
"Estos apoderamientos son multipersonales, multidisciplinares, y mancomunados lo que implica que Elena Arias no tenía capacidad para representar por si sola a la empresa sino que debía hacerlo junto con el respaldo de, al menos, otro apoderado", reseñó la empresa.
