La investigación revela que el incendio de Busindre tuvo su origen en una línea de media tensión

Actualizado: viernes, 16 junio 2006 20:09

El informe técnico sobre las causas del fuego fue trasladado esta semana al Juzgado de Primera Instancia de Luarca y a la Comandancia

OVIEDO, 16 Jun. (EUROPA PRESS) -

La investigación de la Guardia Civil sostiene que el incendio de Busindre que arrasó 2.000 hectáreas de monte en el concejo de Valdés tuvo su origen en la línea de media tensión que cruza la zona. Las rachas de viento de entre 60 y 70 kilómetros por hora que se registraron en el lugar habrían provocado que los cables de la línea Navelgas-Ablanedo produjeran chispas al golpear los árboles, lo que inició el fuego, según se desprende de la investigación.

El informe técnico de la Guardia Civil sobre las causas del incendio se trasladó esta semana al juzgado de primera instancia de Luarca y a la Comandancia de Oviedo, según confirmó a Europa Press la Benemérita.

Según la investigación, la distancia entre las torretas de los postes, que era de 700 metros, y el recorrido de la línea por el vano de una montaña, habrían facilitado el balanceo de los cables por el fuerte viento. Algunos vecinos relataron a los investigadores que cuando se produce viento fuerte resulta frecuente observar chispas en la zona.

La Consejería de Justicia, Seguridad Pública y Relaciones Exteriores ya apuntó en su día al tendido de media tensión como una de las hipotéticas causas del fuego. Los responsables regionales están, no obstante, a la espera de recibir el informe de su investigación, según confirmó un portavoz del 112-Asturias.

En las labores de extinción del fuego de Busindre, que se inició el pasado 21 de mayo, participó un amplio dispositivo de 50 bomberos, reforzado por dos hidroaviones del Ministerio de Medio Ambiente y un helicóptero. En el terreno quemado había principalmente monte raso, pino y eucalipto, según informaron en su día fuentes del servicio 112.

En el dispositivo de extinción de incendios participaron efectivos de los parques de bomberos de La Morgal, Tineo, Cangas del Narcea y Valdés, además de cinco empresas forestales, Protección civil y de la Guardería de Medio Rural, del Ayuntamiento de Valdés y de la Guardia Civil. En total intervinieron en las labores de extinción 50 efectivos.

Los equipos emplearon en las labores 7 autobombas, dos de ellas nodrizas, y 11 todoterrenos, además del helicóptero y los dos hidroaviones. Las labores se realizaron básicamente desde dos frentes: uno en Valdés y otro desde Navelgas, en Tineo.

Debido al incendio, el Consejero de Justicia, Seguridad Pública y Relaciones Exteriores, Francisco Javier García Valledor, se vio obligado a ordenar la activación del Plan de Emergencias de Protección para Incendios Forestales (INFOPA) en el Principado ante la proliferación de incendios en la zona accidental.