"Me da igual que me digan que esto es ilegal, esto no se puede parar", dice Antela Pérez
GIJÓN, 3 Abr. (EUROPA PRESS) -
El proyecto 'Ningún niño sin cenar' volverá a abrir sus puertas la semana próxima, previsiblemente el martes, después de conseguir que les cedieran dos locales, uno en la carretera del Obispo, propiedad de una empresaria inmobiliaria, y otro en el edificio 'Gacela' frente al Molinón, perteneciente a un despacho de arquitectos, que les cede un espacio que no usan.
Así lo ha confirmado a Europa Press Antela Pérez, impulsora junto a Blanca Menéndez de esta idea, que tuvo un primer contratiempo cuando este pasado miércoles la dueña del primer local que les cedieron para la iniciativa les echó del mismo apenas 24 después.
"Me da igual que me digan que esto es ilegal, esto no se puede parar", ha destacado Pérez, quien ha aclarado que hay varios abogados que se han ofrecido a ayudarles a gestionar la mejor fórmula para legalizar el proyecto.
También han recibido otros ofrecimientos, como el de una compañía telefónica para establecer una línea en el local. Una propuesta que aún no está materializada, por lo que Pérez señala que cualquier compañía que les quiera poner dos líneas telefónicas y Wifi será bien recibida. Esta noche recibirán las llaves de uno de los locales y mañana las de otro, aunque aún tardarán varios días en acondicionar ambos.
Y es que la lista de voluntarios no deja de crecer. Incluso desde Londres les ha llegado una donación para comprar un carrito de la compra por 100 euros y también un cheque de un particular para comprar a los niños playeros. De hecho, las dos Web abiertas de la iniciativa suman 10.000 seguidores una y 2.500 amigos otra. De momento, será el medio por el que la gente pueda ponerse en contacto con ellas.
Pérez ha incidido en que en la ciudad hay niños que pasan necesidades y ha contado el caso de dos niñas de 12 años que pidieron comer en el comedor escolar y no les dejaron. En ese mismo colegio, estas dos mujeres altruistas entregaron, a través de la petición de una monja, unos playeros a un niño que no tenía. "Acabáis de darle la vida a este niño de 12 años", fue la respuesta de la monja.
Una vez abiertos los dos locales, ya se podrá recibir de nuevo alimentos, ropa, pero también otros enseres como cunas. Una de las cosas que más echan en falta es leche de fórmula de inicio para los bebés más pequeños.
Eso sí, del Ayuntamiento solo han recibido un mensaje privado de un concejal en el que las felicita por la iniciativa y se pone a su disposición, aunque Pérez aún espera respuesta a su petición de un local. Esta ha animado a pensar que a cualquiera le puede sobrevenir esta situación. "Puedo estar yo y mañana Carmen Moriyón", ha apuntado con alusión a la alcaldesa de Gijón.
