CHC firma protocolos con ayuntamientos cántabros para la prevención de inundaciones y la protección fluvial

Nacimiento del río Ebro
Actualizado: domingo, 26 diciembre 2010 10:56

SANTANDER, 26 Dic. (EUROPA PRESS) -

La Confederación Hidrográfica del Cantábrico (CHC) ha firmado protocolos con los ayuntamientos de Mazcuerras y Liendo para la prevención de inundaciones y la protección del ecosistema fluvial.

Además, según información del MARM recogida por Europa Press, existen propuestas de protocolo de colaboración con Cabezón de la Sal, Piélagos, Corvera de Toranzo, Santiurde de Toranzo y Ampuero.

La CHC ha completado la cartografía de los espacios fluviales en 25 términos municipales de su ámbito territorial. Hasta la fecha, diez municipios se han adherido a esta iniciativa que permite definir, de una forma consensuada, los usos admisibles en las zonas inundables, evita la conflictividad en la gestión del dominio público hidráulico e informa a los ciudadanos de las áreas con mayor peligrosidad en avenidas.

La Confederación tiene en marcha un proceso de definición, consensuada con los ayuntamientos de su ámbito territorial, de un espacio fluvial en el que, desde el planeamiento urbanístico y las respectivas competencias de las dos administraciones se protejan los valores naturales, la dinámica fluvial y se evite el incremento de riesgo ante inundaciones.

Este espacio fluvial, acordado entre los ayuntamientos y la Confederación, se materializa mediante un protocolo general de colaboración y se incorpora al planeamiento municipal como suelo rústico o no urbanizable de especial protección, constituyendo un ámbito preferente para las actuaciones de conservación de cauces y los proyectos de la Estrategia Nacional de Restauración de Ríos.

Los protocolos de colaboración definen tres figuras de protección, que son el corredor fluvial, que engloba terrenos de las llanuras aluviales en los que tienden a concentrarse el flujo durante las avenidas; ámbito de protección específica del medio fluvial, que tiene como objetivo definir un espacio de protección de los ecosistemas fluviales adicional al anterior y donde se incorporan figuras de protección como el LIC o Reservas de la Biosfera; y zonas torrenciales, potencialmente expuestos a la ocurrencia de avenidas muy violentas con una elevada capacidad de transporte de carga sólida.