Mil voluntarios participan en esta iniciativa de la Consejería de Medio Ambiente a través de la campaña de primavera
SANTANDER, 20 Abr. (EUROPA PRESS) -
La directora del Centro de Investigación del Medio Ambiente (CIMA), Luisa Pérez, participó este fin de semana junto a un grupo de voluntarios en una salida formativa por el río Miera en Ceceñas, cerca de Solares, organizada dentro del Proyecto Ríos.
Alrededor de mil voluntarios toman parte en la campaña de inspección de primavera 2009, puesta en marcha por la Consejería de Medio Ambiente, lo que supone un incremento del 100 por cien con respecto a los datos de participación del pasado año, informó el Gobierno.
La salida formativa consiste en una inspección tipo en el río, con la metodología del proyecto, los materiales de campo y el asesoramiento de técnicos del CIMA.
Para realizar la actividad, el voluntario tiene a su disposición la 'Carpeta de inspección de los ríos', que contiene el manual, las claves de identificación de la biodiversidad, los materiales para las determinaciones físico-químicas, el mapa cartográfico y la foto aérea de la zona, las fichas de recogida de datos y otros materiales, como la lupa, la red para la captura de invertebrados o los guantes de látex.
Asimismo, puede acceder a la web www.proyectorioscantabria.com, donde podrá obtener formación y recibir la asistencia técnica del CIMA.
El Proyecto Ríos es una iniciativa que la Consejería de Medio Ambiente realiza a través del CIMA y con la que se pretende fomentar el acercamiento de todas las personas interesadas a los ecosistemas fluviales de Cantabria, para que los conozcan y actúen de forma responsable con esos parajes.
Con este objetivo, gracias a las salidas formativas, se elaborará un informe sobre la situación de los ríos de la región con el fin de darlo a conocer entre toda la sociedad. Además, se establecerá una red integrada por ciudadanos que tienen interés por el estudio, la protección y la conservación de los ríos, lo que permitirá adoptar nuevas medidas para mejorar la calidad de los ecosistemas fluviales, determinar responsabilidades respecto a los ríos, en particular, y al medioambiente, en general, y, al mismo tiempo, estimular y potenciar el voluntariado ambiental.
Pueden participar voluntarios a título individual, familias, entidades vinculadas al medio natural (montaña, micología, pesca, deportes acuáticos, senderismo y similares), grupos conservacionistas, entidades públicas, asociaciones vecinales, ciudadanas, culturales o centros educativos.
