El profesor titular de Tecnologías del Medio Ambiente dice que el 90% de las industrias cántabras cada vez están más concienciadas
SUANCES, 17 Jul. (EUROPA PRESS) -
El profesor titular de Tecnologías del Medio Ambiente de la Universidad de Cantabria (UC), Juan José Amieva, destacó hoy el "notable" cambio que se ha producido en los últimos años en la mentalidad empresarial acerca del tratamiento de las aguas residuales.
"En el 90% de las industrias de Cantabria cada vez es mayor la concienciación aunque a las más pequeñas y a los talleres, a veces se les va de las manos", manifestó con motivo de su intervención en la quinta edición del curso sobre 'Tratamiento de las aguas residuales industriales' que se imparte en El Caserío de Suances, sede de los Cursos de Verano de la UC.
A su juicio, este cambio en la mentalidad empresarial se evidencia, por ejemplo, en que, ahora, los responsables de las industrias se muestran "encantados" de que se organicen visitas a sus instalaciones para ver cómo depuran las aguas, mientras que antes era "muy difícil" que les dejasen ir a verlas porque, según dijo, "no estaban llevando a cabo los procesos idóneos".
Además, afirmó que las "exigencias" del mercado han influido mucho en la concienciación. "Los clientes sólo compran producto a aquellas industrias que tienen la ISO de Calidad y la del Medio Ambiente y si no, cambian de proveedor".
Para Amieva ésta es una "gran cadena" que se mueve por intereses económicos que generan beneficio para todos al haber un mayor compromiso medioambiental.
"El primer motivo de las empresas es ganar dinero, no depuran las aguas porque sean empresas ecológicas sino porque a la larga van a ganar más y como los clientes exigen, los proveedores tienen que cumplir para no perder la clientela".
A lo largo de la semana, responsables del área de Medio Ambiente de empresas de la región como Solvay, Nestlé o Textil Santanderina han impartido, junto con algunos alumnos de Ingeniería Ambiental de la UC, charlas en las que se ha hablado de los tipos de tratamiento aplicados en la industria para reducir al máximo el impacto de los efluentes que llegan al mar.
En este sentido, Amieva destacó que el principal avance ha sido la reducción del volumen de agua residual ya que ahora se utiliza menos caudal y eso hace que llegue menos agua al tratamiento.
"Conozco empresas que después de haber ido ampliando la depuradora conforme la producción aumentaba han reducido el caudal con la mejora continua y se encuentran ahora con que parte de la depuradora está obsoleta porque ya no se utiliza", explicó.
Con respecto a la legislación ambiental, Amieva consideró que cada vez hay más contacto entre Administración pública y empresa y que esto provoca que "las cosas que se piden sean cada vez más lógicas y se vayan acercando posturas". Sin embargo, asegura, "siempre es posible reducir más, aún no hemos llegado al mínimo impacto ambiental".
