Seleccionados entre trabajadores y Amigos de Fundación Eroski SANTANDER, 25 Mar. (EUROPA PRESS) -
Los parques naturales de Doñana (Huelva), Delta del Ebro (Tarragona), las Marismas de Santoña y Noja (Cantabria), Monfragüe (Cáceres), y el Alto Tajo (Guadalajara) acogieron durante las vacaciones de Semana Santa las tareas medioambientales de cuarenta voluntarios seleccionados entre trabajadores y Amigos de Fundación Eroski.
Por segundo año consecutivo, Fundación Eroski y la organización conservacionista de aves SEO/Birdlife han puesto en marcha el programa de voluntariado ambiental que tiene como objetivo colaborar en la prevención y mejoría de la gestión ambiental, detectar problemas emergentes, sensibilizar a la sociedad y tratar de comprometerla en su solución, según informó hoy la fundación en una nota.
Dependiendo del campo de trabajo al que se destinó a cada voluntario se realizó una u otra actividad. En las Marismas de Santoña las acciones principales de voluntariado se centraron en tres líneas.
En primer lugar, se procedió a la lectura de anillas en las marismas para realizar un seguimiento exhaustivo de aves, con el objetivo de detectar las rutas migratorias, cambios, longevidad de las especies y estado de la población. Se realizó también un censo de nidos de golondrinas y aviones comunes, con el control de suciedad y situación de la comunidad.
Por último, se llevaron a cabo trabajos de eliminación de la planta 'Uña de león' que se extiende por las Marismas de Santoña. Esta planta exótica, denominada científicamente Carbropotus Educis, es una especie invasiva que crece en las dunas y no permite el crecimiento de otras plantas ni la generación de dunas.
En el resto de espacios naturales se desarrollaron otras acciones: anillamiento de las aves (Parque Natural del Alto Tajo), mejora del hábitat (Parque Natural de Doñana), mantenimiento de áreas recreativas (Parque Natural del Alto Tajo y el del Delta del Ebro) y avicultura ecológica.
Las actividades realizadas por los voluntarios durante el período vacacional de Semana Santa se centraron en el seguimiento de especies, su conservación y tareas relacionadas con el uso público de las zonas protegidas: sensibilización, limpiezas de zonas abiertas al público, arreglo y mejora de instalaciones ornitológicas, plantación de árboles, etcétera.
Para el buen desarrollo de este voluntariado se cuenta con la colaboración y apoyo de los gestores de los cinco espacios naturales protegidos seleccionados. Además, se impartió formación previa al inicio de los trabajos para que los participantes conociesen la tipología y características de los campos de trabajo donde realizaban las acciones.
EL VOLUNTARIO, "FUNDAMENTAL".
Federico García, coordinador del área de Educación Ambiental y Voluntariado de SEO/BirdLife aseguró que los trabajos que realizan "permiten dar un importante impulso" a su programa de gestión medioambiental, por lo que abogó por "resaltar la figura del voluntario por ser fundamental para seguir trabajando en beneficio de las aves y la naturaleza en general".
Marta Areizaga, directora de Responsabilidad Social de EROSKI, aseguró que a través de esta segunda edición se mantiene "el compromiso de trabajar y concienciar a la población en la conservación del medio natural, al considerarlo como parte integrante de la sociedad y del futuro de las nuevas generaciones".
En esta edición ha aumentado el número de personas interesadas en participar en el programa medioambiental, recibiéndose un 27 por ciento más de solicitudes que en el ejercicio anterior, lo que manifiesta la mayor implicación y concienciación de la población en torno al mundo medioambiental. Para la selección de los voluntarios se valoraron las motivaciones de los inscritos, así como información relevante sobre nivel de conocimientos, trayectoria profesional y labores desplegadas en el área del voluntariado medioambiental.
