CANTABRIA.-Laredo rinde honores a Diego del Barco en el bicentenario de su muerte durante la toma del Fuerte del Rastrillar

Homenaje a Diego del Barco
GOBIERNO
Actualizado: miércoles, 26 febrero 2014 19:32

LAREDO, 26 Feb. (EUROPA PRESS) -

Una estatua del brigadier coruñés Diego del Barco honra desde este miércoles, junto al Mercado de Abastos de Laredo, la memoria de quien entregó su vida hace 200 años para liberar a la villa pejina de la ocupación francesa.

Su inauguración ha servido para saldar una "deuda histórica" contraída con este héroe que resultó herido de gravedad junto a la antigua Taleta -a escasos metros donde se erige la figura en su honor- mientras lideraba la ofensiva española en la que está considerada la última gran batalla de la Guerra de la Independencia.

Su "arrojo y determinación" al afrontar el ataque final al Fuerte del Rastrillar permitieron que la población civil pudiera regresar a sus hogares para disfrutar de la recién recobrada libertad.

Cientos de laredanos han respaldado el homenaje con su presencia en un acto en el que el alcalde, Ángel Vega, ha descubierto la placa en recuerdo de Diego del Barco junto a la concejal del Ayuntamiento de La Coruña, Carmen Hervada, que ha acudido en representación del alcalde coruñés Carlos Negreira.

Junto a ellos han presidido la celebración la consejera de Presidencia del Gobierno de Cantabria, Leticia Díaz; el coronel representante institucional de las Fuerzas Armadas en la Región, Manuel Luis Arjonilla; el coronel director del Patronato Militar Virgen del Puerto de Santoña, Fernando Rodríguez Insausti; el coronel director del Museo Militar de La Coruña, Fernando Mariño; y el Comandante Naval de Cantabria, Enrique Liniers.

También han tomado parte la alcaldesa de Santoña, Milagros Rozadilla; la alcaldesa de Limpias, María del Mar Iglesias; miembros de la asociación de recreación histórica de La Coruña 'The Royal Green Jackets'; el presidente de la Asociación Napoleónica Española; el Patrón Mayor de la Cofradía de Pescadores de San Martín; una vicerrectora de la Universidad de Cantabria, así como concejales de la corporación laredana y otros representantes del tejido asociativo y cultural de la villa.

Tras la presentación del acto a cargo del director del Archivo de Laredo, Baldomero Brígido, el alcalde ha evocado la gesta de aquella noche del 21 de febrero de 1814 en la que las tropas españolas "sin artillería pesada que las protegiera, lanzaron un ataque contra las posiciones del ejército invasor" y padecieron numerosas bajas.

Uno a uno a dado lectura al nombre de los 37 soldados que perdieron su vida en tan decisiva acción bélica. "Uno no muere mientras se le recuerda", ha subrayado Vega antes de destacar que "Laredo, a través de esta estatua -idéntica a la que desde hace ocho años se asoma al mar en los Jardines de la Maestranza coruñesa- recordará siempre a Diego del Barco y a quienes dieron su vida por España y los españoles".

El acto ha continuado con un toque de oración a cargo de un cornetín del ejército, que ha precedido a la entrega de una corona de flores a los pies de la estatua, a cargo de la consejera Leticia Díaz y del coronel Arjonilla. A continuación, un piquete de honores integrado por alumnos del Patronato Militar Virgen del Puerto de Santoña ha procedido a hacer una descarga de fusilería en honor del héroe coruñés.

A su término, autoridades civiles y militares han subido a bordo del tren atalayero para trasladarse hasta las inmediaciones del Fuerte del Rastrillar, cuya entrada principal lleva el nombre del brigadier Diego del Barco. Allí, el experto en fortificaciones e historiador Rafael Palacios y Arsenio García Fuertes, autor de la biografía de Diego del Barco, han explicado los detalles de la hábil maniobra militar que culminó con la liberación del fuerte de la ocupación francesa.

Las celebraciones han culminado en el interior de la iglesia de Santa María de la Asunción, donde ha tenido lugar una ofrenda floral sobre la lápida bajo la que está sepultado un joven brigadier cuya heroicidad ha servido para estrechar lazos de sangre entre Laredo y La Coruña y cuyo nombre siempre quedará asociado en la villa laredana a la palabra 'Libertad'.