Convencido de que los partidos llevarán proyectos de ciudades inteligentes en sus agendas de las próximas elecciones municipales
SANTANDER, 2 Sep. (EUROPA PRESS) -
El alcalde de Santander y presidente de la Red Española de Ciudades Inteligentes (RECI), Íñigo de la Serna, ha reivindicado este martes en Santander una "coordinación" europea para que las ciudades compartan la información generada a través de las bases de datos y plataformas puestas en marcha para el desarrollo de las denominadas 'smart cities' o ciudades inteligentes.
Así, ha puesto de manifiesto la importancia de que "si una persona en Berlín usa una plataforma con los datos obtenidos, nosotros podamos usarlos para contrastarlos con las situaciones que se producen en nuestras ciudades", al tiempo que ha pedido que esta misma coordinación debe darse, en primer lugar, entre las ciudades españoles.
Durante su intervención en el 28 Encuentro de Telecomunicaciones y Economía digital: el reto europeo', que se está celebrando esta semana en los Cursos Avanzados de Verano de la Universidad Internacional Menéndez Pelayo (UIMP), De la Serna ha defendido que haya un "patrón común" entre las ciudades de nuestro país porque "comienzan a lanzar sus propias plataformas de una forma acelerada en las que cada una (cada ciudad) va a su aire".
"Debemos ser capaces de tener unas reglas comunes para que La Coruña o Valencia generen información útil para esas ciudades", ha explicado, pero con la mente puesta en que dicha información se pueda usar también en las demás. Por lo tanto, no ha llegado a plantear la creación de "una sola plataforma", sino que las existentes se coordinen.
De esta forma, considera que este trabajo común serviría para actuar de forma "predictiva" aprovechando todas las posibilidades que las nuevas tecnologías ofrecen y que, a su juicio, no se están aprovechando. Con este tipo de actuaciones, en su opinión, si se produce una rotura de una tubería de agua "pueden suceder cosas con los demás servicios como la movilidad, la seguridad ciudadana o la iluminación" de las ciudades porque, según ha lamentado, "en materia del big data --gestión de grandes cantidades de datos--, el 100% de las ciudades está trabajando de forma reactiva".
"En esta capa es en la que más tenemos que trabajar, no se están aprovechando las posibilidades que se tienen", ha apuntado, al tiempo que ha asegurado que se debe promover la "co-creación tecnológica" de los ciudadanos porque "hoy tenemos aplicaciones móviles en las que el ciudadano transmite sus quejas o sugerencias sobre algunos servicios, pero no hay una manera fácil y accesible para que participe en el proceso de mejora".
Por lo tanto, se ha posicionado a favor de una plataforma "en la que se proporcionen los datos y le facilitemos (al ciudadano) herramientas fáciles para que, teniendo esos datos, pueda experimentar y crear servicios que mejoren las plataformas".
"PARTIDARIO" DE QUE LAS EMPRESAS PRIVADAS PAGUEN LOS COSTES
Preguntado, además, sobre los costes de mantenimiento a largo plazo del sistema tecnológico de las ciudades inteligentes, De la Serna ha asegurado que "sea cual ser el coste, haciendo un balance neto, siempre se produce un ahorro para la administración y una mayor eficiencia". En este sentido, ha comentado que el despliegue de sensores y herramientas digitales en Santander "no tiene un coste elevado en términos de mantenimiento".
"Puede estar entre los 100.000 ó 150.000 euros anuales", ha concretado, cuando ha añadido que "se supone" que es una de las ciudades en las que el coste "es el más caro". Igualmente, ha sostenido que el gobierno cántabro es "partidario" de que el coste "lo pague el sector privado, que lo incorpore como uno de sus costes, pero para eso deben tener un beneficio, por lo que hay que buscar un modelo de negocio que lo haga posible".
Pero los problemas para que el modelo sea viable económicamente, según ha añadido son, en primer lugar, "el propio modelo de negocio" y, en segundo término, "de tipo legal porque la respuesta de los servicios jurídicos era qué tipo de gestión era, porque no era una concesión administrativa" debido a que la entidad que gestione los sensores "cobraría a un tercero y, a su vez, entrarán más actores que manejan los datos".
"Ahí nos metemos en una maraña. El desfase entre las expectativas generadas y lo que tenemos es que no hemos encontrado un modelo de negocio claro. Para que se produzca un despegue todavía hay que seguir mejorando el sistema", ha reconocido, por lo que ha pedido "más flexibilidad de contratos para poder amortizar las infraestructuras" y "más seguridad jurídica para la delegación de los datos que se manejan".
Por otro lado, De la Serna --que también pide modificaciones para favorecer la colaboración público-privada para "minimizar" la inseguridad jurídica de las empresas--, se ha mostrado "absolutamente convencido" de que los planes relacionados con las 'smart cities' en las agendas electorales para los próximos comicios municipales del año 2015, también ha comentado que los políticos tienen que trabajar, en este sentido, para que los ciudadanos confíen en su gestión.
"Tenemos que seguir haciendo un gran esfuerzo en introducirlo (el modelo de 'smart cities') porque da credibilidad y para que el ciudadano perciba que es útil, aunque no sea lo realmente importante, como sí lo es la interrelación de los servicios. Y otra parte importante e intangible que no hay que despreciar es el orgullo de estar participando en un proyecto como las ciudades inteligentes", ha concluido.
