SANTANDER, 11 Ene. (EUROPA PRESS) -
El 48,72 por ciento de las personas ocupadas en actividades de I+D+i en la industria de Cantabria trabajan en el sector metalúrgico, según se desprende del estudio sobre el sector Siderometal 2007 incluido en el proyecto Gesscant y recogido por Europa Press.
En concreto, el personal empleado en investigación y desarrollo en esta área asciende a 249 personas, del total de 511 trabajadores del I+D+i en la industria regional, si se atiende a los últimos datos conocidos, los correspondientes al año 2004 recopilados por el Instituto Cántabro de Estadística (ICANE).
De estos 249 empleados, sin embargo, apenas 16 (12 por ciento) corresponden a mujeres, una cifra que es inferior al conjunto del empleo femenino en la I+D+i en toda la industria cántabra, que es de un 26 por ciento.
Dentro del sector del metal, las actividades que más presencia de investigación y nuevas tecnologías arrojan son las de maquinaria y equipo mecánico (73 empleados, un 29,31 por ciento del total de Cantabria), y la industria de productos metálicos, con 86 empleados.
En cambio, en la fabricación de otras maquinarias y la metalurgia los porcentajes son inferiores, con un 24,89 por ciento y un 11,24 por ciento, respectivamente.
El personal específicamente investigador presenta una proporción de un 36,14 por ciento respecto al conjunto de la industria, destacando el apartado de industria de otras maquinarias (35,5 por ciento), seguido de maquinaría y equipo metálico (26 por ciento) y metalurgia (10,7).
De esta forma, los gastos en materia de personal de I+D+i en este área ascendieron a 8,16 millones de euros (68,7 por ciento del conjunto de áreas industriales). La mayor parte de los salarios, un 47 por ciento, se destinan a las retribuciones del personal I+D no investigador. Los investigadores se llevan el 21,67 por ciento.
Por su parte, en el resto de gastos corrientes, la cifra alcanzó los 4,12 millones de euros (34,6 por ciento del total), y los gastos de I+D de capital se cifraron en 5,45 millones de euros (38,37 por ciento). La mayor parte se dirige a las inversiones en equipos e instrumentos.
