En 2008 ocupaba al 63,3% de los trabajadores de la región, mientras que en 2013 este porcentaje ascendió hasta el 71,9%
MADRID/SANTANDER, 9 Jun. (EUROPA PRESS) -
El sector servicios es el que cuenta con un mayor volumen de trabajadores en Cantabria y España, ya que en el desarrollan su profesión en torno a tres de cada cuatro empleados (el 72 y 76%, en la región y el país), y que en ambos casos supone ocho puntos más que en 2008, coincidiendo con el inicio de la crisis económica.
En concreto, en Cantabria ese repunte ha sido del 8,7%, lo que la convierte en la quinta comunidad autónoma con mayor incremento del personal empleado.
Antes de la crisis, este porcentaje era del 68% en el conjunto nacional, y del 63,3% en la comunidad cántabra, según el análisis que ha realizado Randstad a partir de los datos del Instituto Nacional de Estadística (INE).
De acuerdo con la empresa de recursos humanos, se observa un cambio en el modelo productivo nacional desde 2008, ya que a pesar del descenso de ocupación en todos los sectores económicos, el sector servicios ha registrado la menor caída, del 8,1%, frente al 17,6% del total de trabajadores. Esto ha supuesto que el sector servicios haya aumentado su incidencia en el peso del mercado laboral español.
El descenso en el número de trabajadores del resto de sectores económicos ha sido más pronunciado. En este sentido, Agricultura ha acumulado una variación negativa del 8,8% en sus cifras de ocupación desde 2008, mientras que Industria ha registrado un descenso del 28,9%. Por último, el sector que ha experimentado el mayor descenso ha sido construcción, con una caída del 59%.
Si se analiza el sector servicios en función de la región en la que los profesionales desarrollan su actividad, se aprecia que Baleares es la única comunidad autónoma que ha incrementado su número de trabajadores en el sector servicios respecto a 2008, con un 8,6%.
En el lado contrario se sitúan comunidades autónomas como La Rioja y Asturias, con una variación negativa superior al 14%. Le siguen País Vasco, con un descenso del 10,7%, y Cataluña, que ha reducido un 10,3% sus trabajadores en el sector servicios.
