El acusado de disparar a un hombre afirma que fue en defensa propia y no "para matarle"

Actualizado: lunes, 15 mayo 2006 20:35

La víctima asegura que no hubo afrenta anterior

SANTANDER, 15 May. (EUROPA PRESS) -

Lino R.T., acusado de disparar a un hombre el 30 de noviembre de 2001 en Villasuso de Anievas, ha reconocido hoy que le disparó en una pierna, si bien fue en defensa propia porque previamente la supuesta víctima le atacó con "un palo" con "el mango de un rastrillo" mientras le increpaba "hijo de puta, hoy no te escapas".

Así lo declaró ante la Sección Tercera de la Audiencia Provincial de Cantabria, junto con su yerno José Daniel C.G., quienes se enfrentan a un delito de homicidio en grado de tentativa según la Fiscalía, que pide ocho y seis años de cárcel, respectivamente, y a un intento de asesinato por parte de la Acusación Particular, que eleva las penas de prisión a 15 años para Lino R.T. y 14 de cárcel para el otro procesado.

Lino R.T. aseguró que esa mañana se metió un rifle cuando se dirigía a la finca 'La Valleja' porque tenía "miedo" de la víctima, Serafín, porque el día anterior le tuvo "que escoltar la Guardia Civil" porque el otro hombre "estaba rabioso por un juicio" que tenían por otro incidente, ya que "me había atacado ya cien veces".

"No quise matarle", aseguró Lino R.T., pues "podía haberle matado. Si hubiera querido matarle, lo mato", reiteró, explicando que su yerno José Daniel C.G. no estuvo presente en la mañana de autos y que de los dos disparos que efectuó, uno fue al aire, para asustarle, pero como Serafín siguió avanzando, le apuntó a la pierna.

José Daniel C.G. corroboró las palabras de su suegro, afirmando que esa mañana le vio, pero que cada cual se dirigió a sus quehaceres, asegurando que ni él ni su mujer tenían una mala relación con Serafín, pero que sí eran tensas entre la víctima y sus suegros.

Por su parte, la víctima aseguró que "estaba trabajando" cuando de repente oye a Lino que le increpa con que le va "a matar por haberle tirado las estacas". Entonces, le disparó dos veces, fallando la primera, e impactando en la pierna la segunda, perdiendo a continuación el conocimiento.

HERIDA NO NECESARIAMENTE MORTAL

Según explicaron los peritos forenses, la herida de Serafín era "muy grave", porque alcanzó hasta el hueso, pero "no necesariamente mortal", habiéndole quedado como secuelas limitación en la flexión de la rodilla derecha, pérdida de movilidad del pie y diversas cicatrices.

Los peritos balísticos indicaron que el primer disparo era de bala y el segundo un cartucho de perdigones, que se efectúo a unos "dos metros" como máximo.

El agente de la Guardia Civil que asistió a Serafín testificó que éste le dijo que los autores del disparo habían sido los dos procesados, ya que el yerno le pasó la escopeta al suegro, aunque fue este último el autor material.

No obstante, hubo también testigos que expusieron a la Sala que vieron a Serafín alrededor de Lino R.T., su mujer y su hija el día anterior a la presunta agresión, lo que había sido negado previamente por la víctima.

Así, un de las testigos vio a Serafín aparecer tras una "pedrada" que recibió Lino R.T. en su coche, y otra en los alrededores de una farmacia donde supuestamente también Lino R.T. fue hostigado por Serafín.

El juicio se reanudará mañana, a las 11.30 horas, con las calificaciones finales de las partes.