AMPL.-Tribunales.- El jurado declara culpable de homicidio al acusado de dar muerte a Gina Calderón

Actualizado: viernes, 31 octubre 2008 20:16

SANTANDER, 31 Oct. (EUROPA PRESS) -

El tribunal del jurado ha declarado culpable de homicidio a Javier López Villanueva por dar muerte, en mayo de 2007, a Gina Calderón en la localidad de Carrejo.

Tras deliberar desde las nueve y media de la mañana, el jurado ha considerado probado que el acusado estranguló y asfixió a la víctima, pero en cambio descartó que estuviera afectado por el consumo de drogas y también que hubiera alevosía, al rechazar, por un voto de diferencia que atacara a su pareja mientras ella se encontraba dormida sin que ella pudiera defenderse, lo que le hubiera convertido en culpable de asesinato.

De esta forma, el fiscal solicita una pena de 13 años de prisión, al considerar que el homicidio tiene el agravante de parentesco. Por su parte, las acusaciones particulares piden la pena máxima para estos casos, que es de 15 años de prisión, y consideran que la responsabilidad civil no ha sido satisfecha.

Finalmente, la defensa cambia su petición de pena de los cinco años iniciales a diez, y sostiene que la reparación del daño no ha podido hacerse al no haberse comprobado la existencia de herederos de la víctima.

Los miembros del jurado han rechazado a que al acusado se le concedan beneficios de suspensión de la pena y que se proponga al Gobierno de la Nación el indulto total o parcial de la pena que se le imponga. El Jurado ha considerado probado por unanimidad que el acusado estrangulara a la víctima, a quien previamente causó varios cortes en el cuello con un cuchillo y golpeó reiteradamente hasta desfigurarle el rostro, aunque en cambio se rechaza que los golpes tuvieran exclusivamente el objetivo de aumentar el dolor a Gina Calderón.

Ambos mantenían una relación sentimental, y él era consumidor de cocaína desde hacía diez años, si bien consumía cantidades mayores los fines de semana, hechos que también se han considerado probados por unanimidad.

Asimismo, se da por probado, pero no por unanimidad, sino por ocho votos frente a uno, que el acusado había dicho que si consumía una cantidad importante de cocaína y alcohol, podía llegar a matar a Gina Calderón.

Por el contrario, entre los hechos no probados se encuentran los relacionados con el consumo de sustancias estupefacientes como cocaína y alcohol, y que esto hubiera afectado a su capacidad para ser dueño de sus actos.

SUCESOS

Los hechos ocurrieron en mayo del año pasado, en el domicilio del agresor, situado en la localidad de Carrejo, donde su pareja, de nacionalidad colombiana, pernoctaba en algunas ocasiones.

Así, el 6 de mayo del año pasado, la víctima decidió quedarse a dormir con el procesado y cuando ésta se encontraba en el dormitorio, el acusado, Javier L.V., de 38 años de edad, cogió un cuchillo de cocina y le hizo varios cortes en el cuello, que le afectaron varios músculos sin llegar a afectar a las carótidas o yugulares ni a otros órganos vitales.

Acto seguido, y con la intención de acabar definitivamente con la vida de la mujer, el acusado procedió a presionar con sus manos el cuello de la víctima, impidiendo la entrada de aire en los pulmones, hasta que la mujer falleció por asfixia.

Después, el presunto homicida salió de la habitación y él mismo se produjo diversos cortes superficiales en las muñecas y el cuello, permaneciendo en la vivienda hasta el día siguiente, cuando fue hallado por diversos familiares, alertados por la desaparición de la víctima.

El acusado es consumidor esporádico de cocaína, si bien esta circunstancia no le afecta en modo alguno en su capacidad para entender o querer, sin que por tanto sufra trastorno alguno que justifique lo que hizo.

El procesado, que fue detenido al día siguiente de cometerse el homicidio, ha permanecido desde entonces privado de libertad, sin que hasta ahora haya asumido la responsabilidad de lo que hizo y manteniendo que no es consciente de lo ocurrido.