SANTANDER, 17 Mar. (EUROPA PRESS) -
Comisiones Obreras de Cantabria denunció hoy que el retraso del Gobierno de Cantabria en la adjudicación de licencias de la televisión digital terrestre (TDT) "está asfixiando" a las empresas.
En un comunicado, el sindicato recordó que desde agosto de 2008, cuando el Gobierno de Cantabria declaró desierto el concurso para repartir las licencias autonómicas y locales de TDT y hasta el día hoy, sigue sin haber licencias porque el concurso de las licencias locales está abierto y el de las autonómicas, cerrado.
Mientras tanto, algunas de las empresas decidieron asociarse (Canal 8 DM, Localia, Telebahía, Cantabria TV --antes Telecabarga-- y Tu TV) para defender intereses comunes y demandar a la Consejería de Industria que impulsara el concurso público de las licencias para conseguir el doble objetivo de dejar de emitir sin cobertura legal y concurrir en mejores condiciones al espacio de la TDT antes del apagón analógico.
CC.OO. recordó que "la mayoría" de aquellas empresas ya han dejado de emitir, y algunas como Canal 8 ha despedido a la mayoría de sus trabajadores. "Ayer se comunicaba la resolución del contrato a nueve de ellos, la empresa ha tirado por un extremo de la calle sin ofrecer soluciones menos traumáticas", denunció el sindicato.
"Las estrategias empresariales que siempre rompen por la parte más débil la cuerda, junto con el retraso en la adjudicación de las licencias de la TDT (sin resolver hasta el mismo día del apagón analógico), expulsan injustamente del mercado laboral audiovisual a cerca de una centena de profesionales de los medios de comunicación. El Gobierno Regional, tan preocupado por la emisión de la 'Champions League', es en gran parte responsable, por omisión, de esta pérdida de empleo", criticó CC.OO.
En opinión de la Federación de Servicios a la Ciudadanía de CC.OO., la "riqueza añadida" a la exportación de esta tecnología, la pluralidad de la oferta y la mejora de la calidad "ha esta siendo empañada por una nefasta gestión pública y por una competencia empresarial de poco futuro y bajo perfil". En este sentido, defendió que "la mayor concurrencia empresarial en los concursos públicos de adjudicación de licencias hubiera permitido a los cántabros elegir las mejores y no sólo las que han sido capaces de sostener el empleo antes de ser asfixiadas".
