SANTANDER, 19 Ago. (EUROPA PRESS) -
El presidente de la Fundación Círculo de Economía, Antón Costas, ha considerado que el "problema" de España no reside en su crecimiento económico, que ha destacado como el de "mayor ritmo" de las economías occidentales, sino en que no se reparte de forma adecuada la riqueza y el bienestar.
"España está creciendo, desde el año 2014, al mayor ritmo de todas las economías occidentales. Nosotros no tenemos un problema de crecimiento sino de prosperidad inclusiva, ese crecimiento no reparte bien su bienestar y su riqueza entre el conjunto de los ciudadanos", ha asegurado este lunes en Santander en declaraciones a los medios.
Costas ha valorado así la situación de la economía española con motivo de su participación en el curso 'La gran transformación. Economía y políticas para una prosperidad inclusiva' que se celebra esta semana en la Universidad Internacional Menéndez Pelayo (UIMP).
Asimismo, el economista ha considerado que existan "aspectos muy preocupantes", como la pobreza de los jóvenes que, según ha dicho, presenta una amplia disparidad entre aquellas personas con estudios universitarios y sin ellos.
"Los jóvenes de hoy entre 19 y 33 años ganan hoy, en términos equivalentes, lo que ganaban sus padres hace 10 años pero aquellos jóvenes españoles que no tienen estudios universitarios ganan menos de lo que ganaban sus padres hace 20 años", ha lamentado.
De igual manera, el presidente de la Fundación Círculo de Economía ha criticado que España sea "el único país del mundo" en el que un 73% de los jóvenes de entre 19 y 33 años "no está emancipado". "Esto tiene unas consecuencias dramáticas para la vida de esas personas, su capacidad de emancipación y consecuencias demográficas y económicas extraordinarias", ha aseverado.
Además, Costas ha apuntado a la pobreza infantil "creciente" como otro de los datos preocupantes de España, "aunque no queramos hablar de eso".
Frente a ello, el economista ha señalado que el mensaje de 'La gran transformación' es aquel que va "contra el pesimismo y el fatalismo de pensar que las cosas solo pueden ir a peor y que la desigualdad solo puede seguir aumentando".
En este sentido, ha abogado por "volver a poner a la economía al servicio de las personas" frente a la tendencia de los últimos 30 años donde, a su juicio, se ha puesto a la sociedad y a las comunidades "al servicio de una visión determinada de la economía de visión neoliberal".
Costas ha considerado que nos encontramos en el "umbral" de una "gran transformación", similar a la que ocurrió después de la Segunda Guerra Mundial y que dio origen al Estado del Bienestar, con una economía "regulada", mercados "eficientes pero controlados" pero, ante todo, "una economía capaz de suministrar buenos empleos con buenos salarios".
Por último, el economista ha advertido contra la creencia de que los problemas de desigualdad y de inseguridad económica se pueden resolver "sólo a través del proteccionismo, como dicen los populistas de derechas" o "sólo con redistribución, los impuestos y el gasto, como dicen los populistas de izquierdas".
