La Policía Local de Santander ha arrestado a otros tres conductores por infracciones de tráfico, uno de ellos sin carné y ya condenado
SANTANDER, 7 Jun. (EUROPA PRESS) -
La Policía Local de Santander ha detenido a un conductor que circulaba a una velocidad de 118 kilómetros por hora en una zona con limitación a 50 y además superaba en más del doble la tasa permitida de alcohol.
Según informaron hoy fuentes policiales en un comunicado, el suceso ocurrió sobre las cuatro y media de la madrugada de hoy domingo en la avenida Eduardo García del Río, donde se había instalado un control de velocidad.
Tras ser interceptado, el conductor, L.S., fue sometido a la prueba de la alcoholemia, constatando que duplicaba los niveles permitidos, y fue detenido por un presunto delito contra la seguridad vial.
Además de este arresto, la Policía ha practicado otras tres detenciones en las últimas horas por infracciones de tráfico. La primera fue ayer sábado, pasadas las cinco y media de la tarde, en la calle Augusto González Linares.
En este caso, en el transcurso de una intervención, los agentes sorprendieron al conductor de un turismo, H.R., que no tiene permiso de conducir y que, además, ya había sido condenado previamente por ello por un juzgado de Santander. El hombre fue detenido y el vehículo fue trasladado por la grúa al Depósito Municipal de Candina.
Ya por la noche, la Policía detuvo a otro conductor, sobre las doce y media en la calle Campogiro. El hombre, A.A., fue interceptado por la Guardia Civil por cometer una infracción y éstos avisaron a la Policía Local, que al llegar comprobó que superaba en más del doble la tasa permitida de alcohol.
Por último, poco después de las cinco y media de la madrugada se arrestó a un cuarto conductor, J.M., por negarse a realizar la prueba de la alcoholemia en un control rutinario instalado en la calle Jesús de Monasterio.
En cuanto a los controles en zonas de ocio, durante la noche de ayer sábado y la madrugada de ayer domingo se realizaron 28 pruebas de alcoholemia en las que se localizó a siete personas que conducían bajo la influencia de bebidas alcohólicas.
