El patronato del instituto aprueba la memoria de actividades del año pasado
SANTANDER, 8 Ago. (EUROPA PRESS) -
El Instituto de Formación e Investigación Marqués de Valdecilla (IFIMAV) ha trabajado, durante 2011, más de 100 proyectos de investigación que siguen activos, en las áreas de cáncer, neurociencias, transplante, metabolismo y envejecimiento, e infección e inmunidad. Además, se han realizado programas sobre epidemiología y salud pública, y microscopia avanzada, plegamiento de proteínas y citoesqueleto.
En total, el instituto ha desarrollado su actividad en 30 grupos de investigación que continuan su trabajo actualmente, constituidos por cerca de 500 profesionales, entre investigadores, colaboradores, y personal técnico, pertenecientes en su mayor parte al Hospital Universitario Marqués de Valdecilla y a la Universidad de Cantabria, ha informado el Gobierno en un comunicado.
Éste es uno de los principales resultados de la actividad del IFIMAV, tal y como lo recoge su memoria de 2011 que ha sido aprobada durante la reunión de este miércoles del patronato del instituto, bajo la presidencia de la vicepresidenta y consejera de Sanidad y Servicios Sociales, María José Sáenz de Buruaga.
Además, la memoria revela que el Comité Ético de Investigación Clínica de Cantabria al que da soporte IFIMAV, ha aprobado el pasado año 77 ensayos clínicos, y dentro de la extensa red de contactos, el instituto ha colaborado con cerca de 90 instituciones nacionales y de 32 países.
En lo que se refiere a publicaciones, los grupos IFIMAV han producido 293 trabajos y han participado en un total de 21 tesis doctorales, bien a través de su dirección o de su autoría.
En la reunión, además, se ha aprobado la composición de la comisión de evaluación de la convocatoria de contratos postmir Wenceslao López Albo de este año, a la que se han presentado cuatro candidatos, y se ha analizado el informe de patentes de 2011 y de suministros de reactivos y equipamiento del Banco de Sangre y Tejidos de Cantabria.
También se ha tratado sobre la colaboración entre la Biblioteca Marquesa de Pelayo y la Universidad de Cantabria, que se concretará en un próximo convenio, para agilizar el intercambio de bibliografía entre ambas entidades lo que ha permitido reducir costes y mejorar la eficiencia.
