SANTANDER, 14 May. (EUROPA PRESS) -
El Índice de Precios de Consumo (IPC) en Cantabria subió un 1,5% en abril en comparación con el mismo mes del año anterior, lo mismo que la media nacional, y se incrementó nueve décimas respecto al pasado mes de marzo, una menos que el conjunto del país (1%), según ha informado este martes el Instituto Nacional de Estadística (INE).
La principal subida interanual en el cuarto mes el año en Cantabria corresponde a los precios del transporte, mientras que el incremento mensual está impulsado por el vestido y calzado, con la nueva temporada primavera-verano.
En relación con abril de 2018, subieron los precios de todos los sectores salvo el ocio y cultura (-2,8%).
De este modo, en términos interanuales, se incrementaron los del transporte (5,2%) por el aumento de los precios del transporte aéreo de pasajeros, frente a la bajada de abril de 2018; vivienda (2,2%); medicina y hoteles, cafés y restaurantes (1,8% ambos), en este último caso a causa del aumento de los precios de los servicios de alojamiento, superior al reflejado el año pasado; el sector otros (1,4%); y el menaje y el vestido y el calzado, ambos un 1%.
Por debajo de un punto subieron los precios de las comunicaciones (0,6%), enseñanza y alimentos y bebidas no alcohólicas (0,3% ambos) y bebidas alcohólicas y tabaco (0,2%).
Por su parte, los precios en abril repuntaron un 0,9% respecto a marzo impulsados por el vestido y el calzado (7,9%), que recoge el comportamiento de los precios de la nueva temporada de primavera-verano; y el transporte (1,5%), motivado por el incremento de los precios de los carburantes y lubricantes y, en menor medida, del transporte aéreo.
En el resto de sectores en positivo, las subidas no sobrepasaron un punto. Así, en el sector hoteles, cafés y restaurantes los precios crecieron un 0,9% debido a la
subida de los precios de los servicios de alojamiento y la restauración; en menaje y en ocio y cultura, un 0,6%, en este último caso explicado casi en su totalidad por el aumento de los precios de los paquetes turísticos; en el sector otros, un 0,4%; y en medicina, un 0,2%.
Por el contrario, bajaron los precios de los alimentos y bebidas no alcohólicas y de la vivienda, ambos un -0,2%, y la última a consecuencia de la bajada de los precios del gas; y los de las comunicaciones un -0,1%.
Y permanecieron estancados respecto a marzo los de las bebidas alcohólicas y tabaco y la enseñanza.
De este modo, en lo que va de año, los precios no han sufrido variación en Cantabria, con incrementos en transportes (6,5%) y hoteles, cafés y restaurantes (1,3%), entre otros, compensados por descensos en vestido y calzado (7,7%) y vivienda (-2,6%), como principales sectores.
DATOS NACIONALES
En España, el IPC subió un 1% en abril en relación al mes anterior y elevó dos décimas su tasa interanual, hasta el 1,5%, su tercer repunte consecutivo tras el de febrero y su nivel más alto desde el pasado mes de noviembre.
Estadística ha atribuido el repunte de la tasa interanual del IPC de abril al encarecimiento de los paquetes turísticos, de los servicios de alojamiento y del transporte aéreo de pasajeros. Hay que tener en cuenta que la Semana Santa se ha celebrado este año en abril y que en 2018 tuvo lugar en marzo.
La tasa interanual de abril es la trigésimo segunda tasa positiva que encadena el IPC interanual e implica que los precios son hoy un 1,5% superiores a los de hace un año. Con el dato de abril, el IPC suma seis meses consecutivos con tasas interanuales inferiores al 2%.
La inflación subyacente, que no incluye los precios de los productos energéticos ni de los alimentos no elaborados, aumentó dos décimas en abril, hasta el 0,9%, con lo que se sitúa seis décimas por debajo de la del IPC general.
En el cuarto mes del año, el Índice de Precios de Consumo Armonizado (IPCA) situó su tasa anual en el 1,6%, tres décimas más que en marzo.
Según el INE, entre los grupos que contribuyeron en abril a la aceleración de la tasa interanual del IPC se encuentran el ocio y la cultura, que elevó casi dos puntos su tasa anual, hasta el 0,3%, por los paquetes turísticos; hoteles, cafés y restaurantes, cuya tasa anual aumentó medio punto, hasta el 2,3%, por los servicios de alojamiento; y el transporte, que incrementó dos décimas su tasa anual, hasta el 3,2%, por el encarecimiento del transporte aéreo de pasajeros.
