Hasta noviembre, Jiménez mantendrá encuentros con comunidades, colegios, centros de trabajo o residencias de ancianos
SANTANDER, 25 Sep. (EUROPA PRESS) -
El obispo de Santander, Vicente Jiménez, iniciará el domingo, día 27, en Argoños, su primera visita pastoral a la comarca de las Siete Villas desde que tomará posesión de su cargo en septiembre de 2007.
Durante los meses de octubre y noviembre el prelado se acercará en diferentes jornadas a los pueblos de los municipios de Argoños, Arnuero, Santoña, Noja, Meruelo, Bareyo, Cicero y Hazas de Cesto porque quiere "conocer directamente las tierras y las gentes" que viven en esa zona de Cantabria.
Jiménez llegará este domingo, a las siete de la tarde, a la parroquia de Sansalvador de Argoños para celebrar una eucaristía como signo de apertura del inicio de su visita pastoral. A su llegada le estarán esperando el párroco de Argoños, Prudencio Cabrero Gómez, al que acompañarán los fieles de la comarca, sacerdotes y religiosos del entorno, así como los alcaldes de Argoños, Juan José Barruetabeña, y de Arnuero, José Manuel Igual.
El calendario de la visita pastoral se prolongará hasta el 15 de noviembre, día que en concluirá con una eucaristía solemne en la parroquia de Santa María del Puerto de Santoña.
Hasta esa fecha, Jiménez visitará un área enmarcada entre la Ría de Ajo y la Ría de Treto, y entre el Alto de Jesús del Monte y la Bahía de Santoña. Este territorio, dentro de la Diócesis, pertenece al arciprestazgo de Santa María y a la Vicaría de San Andrés.
Las visitas incluirán cementerios, colegios, residencias de ancianos, centros de trabajo o fábricas, así como a enfermos en sus casas, además de encuentros con movimientos apostólicos y asociaciones.
Jiménez visitará en octubre los pueblos de Ajo, Montehano, Escalante, Ambrosero, Gama, Cicero, Moncalián, así como San Miguel de Meruelo y Castillo.
Su periplo pastoral también incluirá las localidades de Noja, Soano y Santoña y ya en el mes de noviembre los pueblos de Treto, Hazas de Cesto, Solórzano, Beranga, Praves, Bareyo y Güemes.
Por su parte, el párroco de Argoños, Prudencio Cabrero, destacó que esta visita del obispo es una oportunidad para "reanimar las energías de los agentes evangelizadores, felicitarlos, animarlos y consolarlos; es también la ocasión para invitar a todos los fieles a la renovación de la propia vida cristiana y a una acción apostólica más intensa", concluyó.
