El PP acusa al Estado de "cebarse" con Cantabria para "meterle por la puerta de atrás" dos "pozos negros" de CO2

Actualizado: miércoles, 20 febrero 2008 12:24

Diego reprocha el silencio del Gobierno cántabro y pide explicaciones a Salgado

SANTANDER, 20 Feb. (EUROPA PRESS) -

El presidente del PP cántabro, Ignacio Diego, acusó hoy al Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero de "cebarse" con Cantabria para intentar "meterle por la puerta de atrás" dos "pozos negros de residuos contaminantes" de los once emplazamientos seleccionados por el Ministerio de Industria como reserva provisional para el almacenamiento de CO2 procedente de centrales térmicas.

En rueda de prensa, el líder 'popular' alertó de las dudas que plantea a algunos científicos este tipo de tecnología y consideró que se trata de una "amenaza grotesca" para los cántabros, a los que Rodríguez Zapatero no da "lo que necesitan" --como el tren de alta velocidad, la financiación de Valdecilla y los 200 millones de euros de los Fondos de Cohesión--, y pretende en cambio "meterles lo que nadie quiere".

Según dijo, las dos reservas fijadas en territorio cántabro se sitúan en zonas litorales de la región, "en las zonas turísticas por excelencia". Una de ellas afecta a una superficie que va desde Suances a Santander, incluyendo otros municipios como Camargo o Astillero, mientras la segunda se sitúa en la zona más occidental de la región --frente a Comillas-- y en parte de Asturias.

Esa selección constata, a su juicio, una "ironía" o incluso la "mala leche" de Rodríguez Zapatero y del Gobierno socialista, que "impiden" que se ejecute el emisario submarino del Saneamiento Saja-Besaya para enviar a mar abierto vertidos ya depurados, y en cambio proponen un "macrotubo" para almacenar en esa misma zona dióxido de carbono transportado "sabe Dios desde dónde o desde qué central térmica de España".

Criticó también que se pretenda "generar" un nuevo problema, "justo cuando se empiezan" a resolver los problemas de contaminación que ha vivido Suances durante décadas por la actividad industrial de la comarca del Besaya, y denunció igualmente la situación de Comillas, donde el Estado aporta una "miseria a plazos" para la Fundación Comillas, al tiempo que quiere colocar "en frente" un "macro vertido de gases contaminantes".

Además, subrayó la paradoja de que el Ministerio de Medio Ambiente haya rechazado la central térmica proyectada por Sniace por su impacto ambiental, y ahora el Estado pretenda almacenar en la región "los residuos de las centrales térmicas que no deja hacer en Cantabria".

Según dijo, aunque algunos expertos apuntan que las centrales térmicas deben situarse cerca de los depósitos de CO2, otros sostienen que pueden estar a "200, 300 ó más de 1.000 kilómetros", lo cual, según Diego, "abre la puerta" para que puedan almacenarse en Cantabria los residuos de centrales "de cualquier parte de España", o bien para que se construyan en la región las centrales que "no quieren" en otros lugares.

IMPACTO AMBIENTAL.

También remitió a informes de algunos expertos para advertir de las consecuencias de esta tecnología, cuyo impacto ambiental está aún "en fase de investigación". De momento, recalcó que los grupos ecologistas ya alertan de que se trata de una tecnología "poco desarrollada y muy costosa" y no se conocen sus consecuencias para la corteza terrestre.

Esta tecnología supone recoger las emisiones de CO2 de las centrales térmicas antes de su emisión a la atmósfera, para tratarlas y licuarlas y transportarlas después a los lugares de almacenamiento, un transporte que se realizaría a través de 'ceoductos'.

Y es ahí donde reside, según Diego, otro de los riesgos de este sistema, ya que aludió a un informes de un grupo intergubernamental de expertos en cambio climático de las Naciones Unidas que asegura que una "repentina liberación" de CO2 de esos 'ceoductos' supondría "un peligro inmediato para la vida y salud humanas".

ZAPATERO MALQUIERE A CANTABRIA.

Aunque en principio lo que ha definido el Ministerio de Industria sólo son reservas, Ignacio Diego recalcó que "la amenaza" está ahí y reprochó el silencio del Gobierno cántabro, al que consideró "indigno de representar a los cántabros". A su juicio, si el Ejecutivo no conocía lo sucedido debería coger "picaporte, puerta y carretera", pero también si lo sabía, ya que en ese caso lo está "ocultando".

Pero a quien criticó especialmente por la elección de esos emplazamientos fue al presidente español, José Luis Rodríguez Zapatero, quien, en palabras de Diego, se caracteriza por "malquerer" a Cantabria, región que sólo visita "obligado por las campañas electorales" para dar un mitin y "desaparecer" después.

"Zapatero y los socialistas han perdido el respeto hace tiempo aCantabria", lamentó Diego, quien pidió a la ministra de Administraciones Públicas y cabeza de lista al Congreso por el PSC-PSOE, Elena Salgado, explicaciones sobre las dos reservas para almacenamiento de CO2.

Ahora bien, recomendó que esas explicaciones sean "un poco más razonables, con más contenido y con menos ira" que las ofrecidas por la secretaria general de los socialistas cántabros y vicepresidenta regional, Lola Gorostiaga, sobre la finca de La Remonta.

Así, el líder 'popular', que dijo comprender el "nerviosismo" del PSOE ante una "inminente derrota del tamaño de la anterior", animó a los socialistas a que las explicaciones sobre esos dos "vertederos descomunales" sean "sosegadas, razonables e intenten tranquilizar" a los cántabros.