Profesoras de ELE subrayan el "creciente interés" de Occidente por la cultura y las lenguas de Asia

Profesoras de ELE
UIMP
Actualizado: viernes, 24 agosto 2012 13:07

SANTANDER, 24 Ago. (EUROPA PRESS) -

Las profesoras de Español como Lengua Extranjera (ELE) Marisa de Prada, Soledad Couto y Dánica Salazar han subrayado este viernes en Santander el "creciente interés" de Occidente por la cultura y las lenguas de Asia.

Este es el tercer verano que imparten en la Universidad Internacional Menéndez Pelayo (UIMP) un curso dirigido a docentes que quieren aprender a enseñar español a alumnos chinos y japoneses y han podido constatar como cada año sus estudiantes "tienen un mayor conocimiento" de estos países.

"Cuando comenzamos este seminario en el Campus de Las Llamas el desconocimiento de estas culturas era absoluto", comentó Couto, para quién "la realidad está cambiando" puesto que, a día de hoy, muchos de los profesores que acuden a las clases han vivido en distintos países asiáticos, conocen mejor su cultura, sus costumbres, la forma de enseñar e, incluso, dijo, "algunos hablan chino o japonés".

En la misma línea se pronunció la profesora de la Universidad de Barcelona Dánica Salazar, para quien este "cambio de tendencia" resulta "especialmente interesante" porque demuestra el "interés mutuo" que se respira en ambas partes: "en China y Japón existe mucha curiosidad por aprender español, y en este país mucha preocupación por descubrir algunas de las lenguas asiáticas".

De Prada, directora del curso y profesora en el IESE de la Universidad de Navarra, comentó que "las marcadas diferencias" que existen entre el sistema de aprendizaje que se sigue en Europa y el de países como China o Japón "dificulta" la adaptación de alumnos y profesores. "Estos jóvenes son muy trabajadores, están acostumbrados a estudiar repitiendo y memorizando, pero son muy poco participativos y comunicativos", añadió.

Por lo tanto, para estas tres profesoras es "fundamental" que los docentes que impartan clases a este colectivo "sean conscientes" de las diferencias a las que se enfrentan y adapten la dinámica y las herramientas del aula a estos estudiantes.

Según Couto, lo primero que tiene que hacer un profesor de ELE que quiera trabajar con alumnos chinos y japoneses es acercarse a su cultura, conocer cómo es la sociedad en estos dos países que, a su vez, dijo, "son muy distintos entre ellos". En el caso de los estudiantes chinos -con los que ella esta muy acostumbrada a trabajar en la Universitat de Lleida- es conveniente saber que su referencia es la de un país "con una población muy grande y una competitividad muy alta".

Además, según explicó, los alumnos que vienen a estudiar español en los últimos años pertenecen a la "generación del hijo único" y, por lo tanto, son chicos en los que sus familias depositan "muchas esperanzas" y viven con una "presión absoluta" durante toda su vida. "Son personas con un acusado sentido del ridículo, no les gustan las sorpresas y necesitan trabajar a un ritmo más lento porque la distancia lingüística entre el español y su idioma es muy grande", añadió.

El curso 'La enseñanza del español para alumnos chinos y japoneses: Aplicaciones prácticas' -organizado en colaboración con el Instituto Cervantes- se ha desarrollado durante toda la semana en la UIMP y además de las docentes que han intervenido en la entrevista ha contado con la participación de la profesora de la Universidad de Nanzan en Nagoya (Japón) María Fernández.