Revilla garantiza que el Psiquiátrico de Parayas no se cerrará y el PP insiste en que los planes son "firmes"

Actualizado: lunes, 19 abril 2010 21:49

Truan pide "sosiego" y cree que no es tiempo de debatir el futuro de las instalaciones, sino la integración de funciones y personal

SANTANDER, 19 Abr. (EUROPA PRESS) -

El presidente regional, Miguel Ángel Revilla, aseguró hoy que el Centro de Rehabilitación Psiquiátrica de Parayas no se va a cerrar. "Mientras estemos nosotros en el Gobierno, Parayas no se cierra", recalcó el jefe del Ejecutivo al ser interpelado en los pasillos del Parlamento regional por algunas trabajadoras del centro que asistieron esta tarde al Pleno en el que se debatió una iniciativa del PP a favor de la pervivencia y modernización del centro.

La moción no salió adelante, al votar en contra los grupos que apoyan al Gobierno (PRC y PSOE), y con ello la diputada 'popular' María José Sáenz de Buruaga cree que ha quedado de manifiesto que los "planes" del Ejecutivo para "echar el cierre" en este centro "eran y son firmes".

Sin embargo, no es eso lo que sostuvo el presidente al ser abordado por las trabajadoras, mientras que el consejero de Sanidad, Luis Truan, en declaraciones a los periodistas, opinó que "no es el momento" ni se dan "las circunstancias" para debatir si las instalaciones se cerrarán o no.

Frente a ello, pidió "tranquilidad, sosiego" y "capacidad de diálogo" para empezar a trabajar en la integración de los profesionales y los servicios del centro en el Servicio Cántabro de Salud (SCS), una integración que deberá producirse en el ámbito del Hospital Universitario Marqués de Valdecilla.

Pero eso, matizó, no implica necesariamente que los pacientes tengan que ser trasladados a nuevas unidades a Valdecilla o Liencres y dejó en el aire otras posibles opciones, por ejemplo, configurar Valdecilla como un hospital con sedes en Liencres y en Parayas.

En cualquier caso, no será una decisión a corto plazo y no habrá traslados "ni mañana ni este año". Además, "en ningún caso" se producirán "traslados o situaciones traumáticas". "Veremos de todo esto lo que resulta", zanjó el consejero, quien dejó claro que no va a haber "vacío asistencial".

Truan destacó que el Gobierno pretende abordar la integración de Parayas en el SCS prevista por la propia Ley de Ordenación Sanitaria, y al mismo tiempo justificó los cambios en la transformación que ha vivido la asistencia sanitaria a la salud mental, que obliga a que también evolucione la organización de las instituciones.

Por el contrario, negó que se esté "dejando morir" al hospital o que se pretenda sustituirlo con los conciertos con el Padre Menni. También rechazó que la intención sea cerrar el centro este año.

Así, insistió en que se trata de abordar la integración en el SCS de su función y sus trabajadores, que tendrán una oferta para integrarse y serán respetados "todos sus derechos". Respecto a las instalaciones en sí, afirmó que están "obsoletas" y "desfasadas" en cuanto a su diseño, pero matizó que han pasado todas las revisiones y no precisó qué ocurrirá con ellas.

"VÍA LIBRE A OTROS PROYECTOS"

En el debate en el Pleno los grupos Regionalista y Socialista defendieron la política del Ejecutivo en materia de salud mental, pero la secretaria general del PP, María José Sáenz de Buruaga, reiteró su convicción de que el Gobierno pretende cerrar el centro de Parayas dentro de una estrategia de "desmantelamiento" de lo público para "dejar vía libre a proyectos más rentables que la salud mental".

A su juicio, PSOE y PRC "pueden poner todas las excusas y matices que quieran", pero con su rechazo a la moción del PP se están negando "a la modernización de Parayas, a la inversión en el centro y a garantizar su pervivencia". "Muy poderosos e inconfensables deben ser sus intereses y compromisos para llevarse por delante todo lo que se van a llevar hoy", apostilló.

Sáenz de Buruaga lamentó el "papelón" que ha tenido que jugar el PRC defendiendo posturas contrarias a las que respaldaba cuando gobernaba con el PP; y criticó además la "penosa" actuación del PSOE, cuyo "discurso social cruje por los cuatro costados".

Además, les reprochó su "hipocresía" por "llenarse la boca" hablando de la normalización de los pacientes mentales mientras les "niegan" el tratamiento, y lamentó que para socialistas y regionalistas la "normalización es deshacerse de todo lo anterior" y no plantear avances.

La diputada 'popular' dejó claro que la intención de su partido no es "imponer" al Gobierno ningún proyecto asistencial concreto, sino garantizar al Centro de Rehabilitación Psiquiátrica de Parayas un futuro "que hoy no parece tener" e impedir que este centro público "nos sea arrebatado".

USO "PARTIDISTA"

Por su parte, la socialista Purificación Sáez recalcó que, "por suerte", no va a ser el PP quien marque los ritmos de la política sanitaria en Cantabria y consideró que la actual "refundación" de Valdecilla es el momento para hablar del futuro de la asistencia mental.

Mientras tanto, desde las filas regionalistas, Rosa Valdés acusó al Partido Popular de utilizar la salud mental "de manera partidista", consideró "irresponsable" que se acuse al Gobierno de "abandonar" a los pacientes y sus familias y defendió el "nuevo modelo normalizador e integrador" por el que apuesta este Gobierno.

Los trabajadores del centro sanitario también hicieron escuchar sus voces esta tarde en el Parlamento, a las puertas de la sede del Legislativo, donde se concentraron con pancartas a favor de la continuidad del centro. Algunos de ellos siguieron además el debate de la iniciativa desde la tribuna de público.