SANTANDER, 24 Sep. (EUROPA PRESS) -
El presidente del Tribunal de Justicia de Cantabria (TSJC), César Tolosa, manifestó hoy que espera que de las negociaciones entre el Ministerio de Justicia y el Gobierno de Cantabria resulte un "adecuado precio" de la transferencia, puesto que "de ello va a depender en gran medida el futuro de la Administración de Justicia", dado que la Comunidad Autónoma "no tiene una capacidad presupuestaria para hacer frente a la calidad del Servicio" al ser una comunidad "pequeña".
En declaraciones a RNE recogidas por Europa Press, Tolosa recordó que el Ministerio ha cuantificado la transferencia en 20 millones de euros y que el Ejecutivo regional espera "que la cantidad se eleve", algo que se negociará a través de las comisiones mixtas formadas por ambas administraciones.
Así, deseó que "la negociación se realice con suma seriedad y rigor" y que "el resultado sea favorable" y consiga que el servicio que se presta a los ciudadanos mejore.
Por otro lado, Tolosa aseguró que en todo este proceso, los profesionales del TSJC han sido "escuchados, atendidos" y han podido "plantear iniciativas", al igual que, según le consta, ha ocurrido con "el resto operadores jurídicos, colegios profesionales y la Universidad". "Es cierto que son los políticos los que negocian, pero no lo están haciendo a espaldas de los intereses de los que formamos el Poder Judicial en Cantabria", recalcó.
'FIN A LA DISPERSIÓN'
Además, el presidente del TSJC se mostró confiado en que "por fin" se pueda acabar con la dispersión de las sedes de Justicia en Santander, ya que este problema "afecta a la comodidad" pero "especialmente a la propia eficacia de la Administración de Justicia", ya que "no es posible que teniendo siete sedes dispersas podamos establecer servicios centralizados".
De este modo, precisó que "es un requisito de eficacia", en el sentido de conseguir que "los mecanismos que hoy se establecen como técnicas novedosas de gestión de los recursos se den en edificios que lo permitan", cosa que "hoy no se produce".
Al finalizar el proceso, Santander contaría con tres sedes judiciales, que "bien organizadas y racionalmente establecidas solucionarían el problema para bastantes años", afirmó.
JUZGADO DE VIOLENCIA
Preguntado por lo que significará la apertura de los juzgados de violencia contra la mujer para las víctimas, el presidente del TSJC manifestó que se pretende lograr "una mejor atención a las víctimas", ya que la justicia penal "siempre" ha trabajado "desde la perspectiva del delincuente, y, en este caso, la protección a la victima constituye un elemento fundamental, que tiene que ser la guía de la actuación los poderes públicos y también del poder judicial".
En este sentido, explicó que "en la medida en que el juzgado de violencia sirva para que esa atención mejore, los tiempos de espera sean menores y para que existan personal cualificado que pueda dar solución a esas víctimas, estaremos caminando en el sentido correcto", ya que "no se trata exclusivamente de castigar al delincuente, sino de proteger a la víctima y ahí el juzgado de violencia supone un avance importante y muy significativo".
Al respecto, indicó que "cuando el ciudadano no se decide a denunciar es porque no confía en la respuesta de los poderes públicos". "Ese es nuestro reto: dar la respuesta adecuada, rápida y eficaz para que cualquier mujer que sufra violencia por parte de su pareja sepa que acudiendo a los tribunales de justicia va a encontrar el amparo que necesita", señaló.
Igualmente, preguntado por si la competencia territorial a tres partidos judiciales -Santander, Torrelavega y Medio Cudeyo- supondrá un trato diferente a las víctimas, según su lugar de residencia, Tolosa aseveró que "cualquier juez del territorio de Cantabria tiene que ser beligerante con la violencia y no sólo el del juzgado de violencia".
Asimismo explicó que esta decisión se adoptó "por agrupar aquellos partidos judiciales más cercanos a la sede donde va a estar el juzgado y para evitar a las víctimas desplazamientos que en muchos casos pueden ser gravosos, tanto desde el punto de vista económico, como personal".
MODERNIZACIÓN DE LA JUSTICIA
Por último, Tolosa aseguró que la modernización de la Justicia "sigue siendo un reto pendiente" porque "llegó con retraso" y aún hoy "la situación de las TIC es bastante precaria", por lo que resulta un reto más en el proceso de transferencia.
Con todo, afirmó que "los problemas de la Administración no se resuelven sólo con medios, sino con el trabajo, esfuerzo e ilusión de los que trabajamos en la Administración de Justicia".
