SANTANDER, 1 Dic. (EUROPA PRESS) -
El Instituto de Física de Cantabria (IFCA, centro mixto Universidad de Cantabria-CSIC) está trabajando en el desarrollo de un mapa de riesgos sobre exposición e incidencia de Covid-19 en la población de Cantabria, para lo cual utilizará datos anónimos de movilidad de los habitantes de los diferentes municipios.
Aplicando técnicas de ciencias de datos y estadística, los investigadores María Castrillo, Álvaro López y Lara Lloret, del Grupo de Computación Avanzada y eCiencia, generarán una herramienta dinámica de vigilancia epidemiológica, a disposición de las autoridades para la toma de decisiones en el caso de futuros rebrotes, ha informado hoy la UC en un comunicado.
El proyecto, titulado 'Predicción del riesgo de exposición e incidencia de la enfermedad Covid-19 en la población', ha logrado una financiación de 19.800 euros en el marco de la convocatoria de Fomento de la Transferencia del Conocimiento lanzada por la Consejería de Universidades, Igualdad, Cultura y Deporte del Gobierno de Cantabria, en la que han sido seleccionados otros dos proyectos de la UC, ambos del IBBTEC.
El mapa de riesgos se transferirá a la Dirección General de Transformación Digital de la Consejería de Sanidad.
Según ha explicado López, el objetivo es caracterizar la incidencia por municipios y el impacto de la enfermedad con respecto a las características sociodemográficas de cada uno de ellos.
Se parte del hecho de que existen colectivos especialmente vulnerables a la Covid19 --mayores de 60 años, personas diagnosticadas de hipertensión arterial, diabetes, enfermedades cardiovasculares y pulmonares crónicas, cáncer e inmunodeficiencias, y embarazadas por el principio de precaución--, y también de que tanto la movilidad como los factores de riesgo no se distribuyen de forma homogénea a lo largo del territorio.
EVOLUCIÓN DISPAR
Los datos de movilidad se han obtenido de las operadoras de telefonía móvil gracias a la participación del IFCA en el proyecto 'Distancia Covid', de la plataforma temática Salud Global del CSIC y financiado por este organismo y AENA, en el cual se estudia el impacto de medidas de distanciamiento social en la evolución de la pandemia.
A esta información se añade la que aporta la Consejería de Sanidad: incidencia con resolución municipal y por grupos de edad y sexo, y Estratificación Poblacional de Riesgos de Cantabria por zonas básicas de salud, en función de grupos de edad y patologías previas.
A lo largo de estos meses, la evolución en Cantabria ha sido dispar, con municipios muy afectados y otros con incidencia nula o muy baja (alrededor de una veintena no han tenido casos). "Lo que pretendemos es desarrollar una herramienta que ayude a la toma de decisiones más informada por parte de las autoridades para ver qué medidas son necesarias, si se pueden anticipar, etcétera", ha explicado López.
El estudio tendrá una duración de un año, estando ahora en la fase de análisis de datos recogidos desde el 15 de marzo. Para consultar los mismos se realizará una aplicación que los científicos intentarán lanzar lo antes posible, de modo que los gestores la puedan utilizar al tiempo que se trabaja en su mejora y en la posible incorporación de otros conjuntos de datos. "No será un mapa o documento estático, sino una herramienta que se pueda ir actualizando", apunta Álvaro López.
