UGT, CC.OO. y CSIF instan a los empleados públicos a movilizarse y a la unidad sindical

Actualizado: miércoles, 19 mayo 2010 14:02

Mañana han convocado una concentración frente a la Delegación del Gobierno y el 8 de junio huelga

SANTANDER, 19 May. (EUROPA PRESS) -

Los sindicatos UGT, CC.OO. y CSI-F de Cantabria han hecho hoy un llamamiento a los casi 40.000 empleados públicos de la región para que participen en las movilizaciones convocadas contra el plan de ajuste del Gobierno central, y han instado a la unidad sindical para hacer frente al mismo.

Para protestar por las medidas anunciadas por el Ejecutivo, en especial por la rebaja salarial del 5% a los funcionarios, los sindicatos han convocado mañana una concentración, a las siete de la tarde, frente a la Delegación del Gobierno en Santander, y huelga general el 8 de junio a nivel estatal.

UGT, CC.OO. y CSI-F quieren que todos los sindicatos de la región estén unidos en las movilizaciones, por lo que van a remitir cartas en los próximos días al resto de las organizaciones de la región con vistas a la celebración de una "cumbre sindical" y la redacción de un manifiesto conjunto.

El secretario general de la Federación de Servicios a la Ciudadanía de CC.OO., Mateo Rodríguez; el de Organización de la Federación de Servicios Públicos de UGT, Antonio Gásquez; y el presidente de CSI-F, José Miguel Zorrilla, han comparecido hoy en una rueda de prensa conjunta para anunciar oficialmente las movilizaciones previstas en Cantabria.

Rodríguez afirmó que "es momento" de unidad sindical, "sin fisuras", porque "todos nos jugamos mucho", frente a unas medidas que son "injustas", "discriminatorias", provocarán "más desempleo" y "van siempre contra los mismos", dijo.

Con estas protestas, los sindicatos quieren que el Gobierno retire el 'plan de ajuste' y negocie una medidas "más acordes" con las necesidades del país y de los trabajadores, explicó.

Los portavoces de las tres organizaciones señalaron que los sindicatos son "conscientes" de la actual situación económica y, como representantes del sector público, saben ser "solidarios" y no les importaría un recorte de sus salarios si estuviera enmarcado en un "esfuerzo equitativo" de todos los sectores para salir de la crisis.

Recordaron que los empleados públicos han sufrido "muchos ajustes" desde hace años y reiteraron que el esfuerzo para hacer frente a la actual situación económica debe ser "compartido entre todos". "Se recurre a nosotros (los funcionarios) y no nos importa apretarnos el cinturón, pero a este cinturón no le queda ningún agujero más", señaló Rodríguez.

Los sindicalistas criticaron además que el Gobierno ha "renunciado" a actuar sobre los ingresos del Estado a través de medidas fiscales, la desaparición del Impuesto sobre el Patrimonio, "rebajas sin equidad" del IRPF, o la concesión del llamado 'cheque-bebé' sin tener en cuenta las rentas.

Asimismo, señalaron que las medidas anunciadas por el Gobierno suponen una "agresión" a las políticas sociales, una "fuerte bajada" de la inversión pública, y no son "generadoras de empleo y cohesión", además de producir una "quiebra muy importante" en el diálogo social.

Destacaron además que los sindicatos se siente "engañados" por el Gobierno, al haber roto de forma "unilateral" el acuerdo a tres años que firmaron ambas partes y que establecía una subida salarial para los empleados públicos del 0,3 por ciento.

Al respecto, aseguraron que la "gran mayoría" de los funcionarios tienen retribuciones que "rondan los 1.000 euros".

Los portavoces sindicales manifestaron, por otro lado, que rechazan "rotundamente" esta "campaña de desprestigio" que en su opinión se está llevando a cabo contra los funcionarios y de "criminalización de lo público". "Hay que huir de estereotipos", señaló Rodríguez.

"FUERTE CON EL DÉBIL"

Por su parte, Gásquez acusó al Gobierno de haber sido "fuerte con el débil y débil con el fuerte", y reiteró que "la crisis es de todos", y no deben recortarse "sólo" los sueldos de los funcionarios.

Zorrilla a su vez criticó que mientras la oferta de empleo en las administraciones se reduce, aumentan la empresas públicas, que según dijo se han duplicado en Cantabria en seis años, y "proliferan" los altos cargos.

El número de empleados públicos de Cantabria asciende a 33.945, de los que 20.244 pertenecen a la Comunidad Autónoma, 5.483 a la Administración General del Estado, 6.325 a las administraciones locales y 1.893 a las universidades, según datos de los sindicatos.