ALBACETE, 19 Feb. (EUROPA PRESS)
El propietario del "hostal Otro Pasarela" de Almansa (Albacete), Crescencio Z.S., negó hoy todas las acusaciones que pesan sobre él por los presuntos delitos contra los derechos de los trabajadores extranjeros y relativo a la prostitución de mujeres en el transcurso del juicio que la Audiencia Provincial sigue contra otros cinco acusados Carmen C.C., Anuncia L.A., Basilisa C.A., Miguelina A.G., y Pedro M.S., todos ellos, a excepción del último, presos preventivos por esta causa desde abril del año pasado.
En la primera jornada de la vista oral, el propietario del hostal rechazó tanto la existencia de una red de explotación sexual como cualquier relación con las chicas que no fuese la relacionada con el alquiler de las habitaciones.
A preguntas del Ministerio Fiscal, Crescencio Z.S. negó asimismo la retención de pasaportes en dicho local y las supuestas presiones que miembros de la red podrían haber ejercido contra testigos protegidos en este proceso.
Sin embargo, sí que admitió ser consciente de que en su interior se ejercía la prostitución asegurando que "si las chicas quieren estar con un cliente y les quieren cobrar que hagan lo que quieran; yo no voy a entrar en la habitación para ver lo que hacen".
Durante la mañana declararon también las cuatro procesadas y todas coincidieron, insistiendo en que en el hostal no se obligaba a ninguna de las chicas a ejercer la prostitución, que todas ellas gozaban de libertad para entrar o salir y que la causa de que la mayoría de ellas fuesen paraguayas era que se llamaban "entre ellas" por relación familiar o de amistad. Según sus declaraciones, sabían que venían a Almansa a prostituirse para ganar dinero y enviarlo a su país de origen.
HECHOS.
Los hechos que se juzgan tuvieron lugar en 2005 cuando, según las conclusiones del Fiscal, se supo que en el hostal 'Otro Pasarela', situado en el kilómetro 583 de la Autovía de Levante (A-31), se realizaban labores de alterne y actividades de prostitución por parte de decenas de chicas procedentes de Paraguay, donde supuestamente eran "captadas" por el propietario con la ayuda de las cuatro acusadas con la excusa de desempeñar algún tipo de trabajo en el servicio doméstico.
Según la versión del Ministerio Fiscal, las jóvenes eran recibidas por el taxista Pedro M.S., el sexto acusado, que las conducía tanto hasta el hostal como para enviar dinero a Paraguay.
Por todo ello se solicitan once años de prisión para cada uno de los principales acusados y cuatro años para el taxista. Las defensas piden la libre absolución.
Mañana continuará el juicio con la declaración de distintos agentes de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado que han intervenido en el proceso.
