CIUDAD REAL, 27 Feb. (EUROPA PRESS)
El alcalde de Ciudad Real, Francisco Gil-Ortega, adelantó hoy que el Ayuntamiento no descarta demandar judicialmente a la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) si no se confirma la denuncia realizada la semana pasada por esta asociación sobre que el agua de la que se abastece la capital no es potable.
En rueda de prensa, Gil-Ortega, al que acompañaba la responsable de Producción de Aquagest, empresa concesionaria del servicio, Esperanza López, anunció que, desde el Consistorio se ha enviado un escrito a la OCU para que ratifique algunos puntos relacionados con la toma realizada el pasado otoño, en la que se basó para emitir su juicio.
En ese documento, se solicita a la OCU que indique la fecha y lugar exacto donde tomó la muestra, el procedimiento de toma de la misma, el procedimiento y tiempo empleado para trasladarla al laboratorio, la acreditación y autorización del laboratorio por parte de las autoridades sanitarias y el procedimiento de la analítica de trihalometanos.
Gil-Ortega, que reiteró que el agua de la capital no plantea ningún problema para su consumo, señaló que, en el caso de que el procedimiento de la OCU no haya sido el correcto o los datos no concuerden con los que consta en el Ayuntamiento, desde el Consistorio se pondrán en marcha alguna respuesta judicial.
Para el alcalde, que aseguró que no se puede alarmar a la sociedad cuando las cosas no son ciertas, no es de recibo que cuando la OCU tomó las muestra no avisara a nadie del Ayuntamiento o de la empresa concesionaria para que les acompañara y que no se sepa, ni si quiera, si tomó una muestra o diez.
TRIHALOMETANOS, POR DEBAJO DE LO FIJADO
Por su parte, la responsable de Producción de Aquagest, Esperanza López, reiteró que los niveles de trihalometanos en el agua de Ciudad Real, en los últimos cinco años, se han mantenido por debajo de los 150 microgramos por litro, lo que establece la ley, y que la OCU decía que se habían superado.
López, que explicó que Aquagest, a través de laboratorios independientes analiza diariamente el agua, criticó la forma de actuar de la OCU, ya que no cumplió el protocolo fijado en estos casos, que establece que, a las 24 horas de hacer la primera prueba se debe hacer una segunda y, si también da los mismos resultados, trasladar esta información a las autoridades sanitarias para que tomen las decisiones que estimen oportunas.
En el caso de Ciudad Real, López recordó que la Delegación de Sanidad nunca ha planteado problemas a sus informes, en los que nunca se ha superado el nivel legal de trihalometanos, elemento que, según dijo la OCU, tomado en grandes cantidades, genera problemas hepáticos y renales, entre otros.
López, por otro lado, pidió a los habitantes de la capital de la provincia que den más crédito a los análisis que se realizaban de manera permanente por la empresa, y que son controlados por Sanidad, a una muestra cuyo análisis entendió como poco contrastado.
PSOE, MIGUELTURRA Y CARRIÓN
Sobre este tema, por otro lado, el alcalde lamentó las declaraciones del portavoz municipal del PSOE, Ángel Amador, quien ha pedido que se solicite un tercer informe sobre el agua a la Consejería de Sanidad o la Universidad regional, ya que, en su opinión, "o la OCU o Aquagest están equivocados".
Para Gil-Ortega, es significativo que Amador, que entiende que con declaraciones no se despeja la duda de que si el agua es potable o no, critique la actuación del Ayuntamiento de Ciudad Real y no diga nada de los ayuntamientos de Miguelturra y Carrión, ambos gobernados por el PSOE y que también se abastecen del pantano de Gasset, al igual que la capital.
