MADRID/TOLEDO, 25 May. (EUROPA PRESS) -
El presidente de Castilla-La Mancha, José María Barreda, destacó hoy que con la reducción de consejerías en su Ejecutivo espera un ahorro de "400 millones" de euros en "un plazo relativamente corto". Por otra parte, puso de relieve "el desconcierto" que han experimentado los ayuntamientos con la restricción del crédito anunciada por el Gobierno central para 2011 y advirtió de que "pone en riesgo las inversiones" ya programadas.
Barreda enfatizó en declaraciones a RNE que el objetivo de la remodelación de su Gobierno es "hacer un esfuerzo para ahorrar 400 millones en un plazo relativamente corto". En esta línea, puso de manifiesto la importancia de los gestos en política y apuntó que ha buscado el consenso con los agencias sociales para poner en funcionamiento las medidas anunciadas.
El jefe del Ejecutivo autonómico confió en que la presidenta del PP en Castilla-La Mancha, María Dolores de Cospedal, apoye las nuevas medidas de austeridad en la región. "Supongo que estará encantada a no ser que se contradiga así misma", añadió.
Por otra parte, Barreda admitió que desconocía que se limitaría el crédito para las consistorios al tiempo que señaló que las corporaciones locales están "desconcertadas" porque "esta medida les complica mucho su gestión y pone en riesgo inversiones que están ya en marcha".
