TOLEDO, 6 Abr. (EUROPA PRESS) -
El Complejo Hospitalario Toledo, dependiente del Gobierno de Castilla-La Mancha, recicló durante el año pasado un total de 110.000 kilos de papel y cartón de los más de 100 puntos de recogida de residuos ubicados en los hospitales Virgen de la Salud y Virgen del Valle y los Centros de Especialidades de Illescas, Ocaña y Toledo.
La recuperación del papel usado y las técnicas de reciclado realizadas por el servicio de residuos del Complejo Hospitalario ha permitido conseguir importantes beneficios medioambientales.
Así, se ha evitado que 1.542,85 árboles fueran talados, que 11.020 metros cúbicos de agua no se hayan consumido, que no se realicen cerca de 14 viajes al vertedero y que 396,72 metros cúbicos de vertedero que no se han llenado.
Los centros dependientes del Complejo Hospitalario Toledo cuentan en sus instalaciones con más de 100 contenedores donde los trabajadores pueden depositar el papel usado, que es retirado cada quince días por la empresa Carpa, que tiene adjudicado este servicio, ha informado el SESCAM en nota de prensa.
Además, existen unos autocompactadores de cartón en los diferentes centros del Complejo, con una capacidad de 22 metros cúbicos y uno en la Lavandería central para reciclar de plástico. Asimismo, cada servicio cuenta con puntos de recogida de distintos residuos sanitarios identificados según la clase de residuos.
RESIDUOS BIOSANITARIOS
Por otra parte, fueron recogidos un total de 157.265 kilos de residuos biosanitarios especiales, químicos y citostáticos. Para lograr una adecuada recogida los centros sanitarios disponen de contenedores de diferentes colores (negros, verdes, amarillos y azules) destinados a cada uno de estos materiales de desecho.
Asimismo, el pasado año en el Complejo Hospitalario también se recogieron 8.360 kilos de placas radiológicas, unos 3.775 kilos de aceite alimentario y 7 toneladas de plástico. Además, el Complejo Hospitalario Toledo cuenta con dispositivos de recogida de otros materiales de desecho, como muebles y otros enseres obsoletos, pilas usadas, mercurio, tubos fluorescentes que son entregados al proveedor y cartuchos de tinta de impresoras y fotocopiadoras.
El Complejo Hospitalario de Toledo realiza una gestión avanzada de residuos, ya que clasifica los residuos sanitarios e incinera solo aquellos que solamente pueden conllevar un riesgo para la salud. Así, el centro clasifica los residuos en generales, sanitarios asimilables a urbanos, biosanitarios específicos, químicos y citostáticos.
