TOLEDO, 21 Abr. (EUROPA PRESS) -
La Comisión Constitucional del Congreso decidirá hoy el futuro del Estatuto de Castilla-La Mancha, sobre el que, tres años después de su aprobación en las Cortes regionales, pesa la posibilidad de que sea devuelto a la comunidad ante la falta de acuerdo de PP y PSOE en materia de agua. El presidente de la Junta, José María Barreda, avisa que "no se rebajará ni una sola gota de agua más" de los 4.000 hectómetros cúbicos de reserva hídrica propuestos, mientras que desde el PP, su secretaria general, María Dolores de Cospedal, considera que "estamos en tiempo de negociación".
En su reunión de hace dos semanas, la ponencia encargada del Estatuto de Autonomía incorporó a su informe la propuesta socialista de suprimir la fecha de caducidad del trasvase, fijada en 2015 en la redacción aprobada en Toledo, a cambio de garantizar a esta comunidad una reserva hídrica calculada en torno a los 4.000 hectómetros cúbicos. El PP se abstuvo como "última oportunidad" al acuerdo, pero luego avisó de que, si la cuestión del agua y la reforma electoral no se corrigen, su voto final sería negativo.
Así, el dictamen de la ponencia salió adelante con el apoyo del PSOE y de CiU. Éste último ha condicionado su apoyo en la Comisión Constitucional en el Congreso al acuerdo de los dos grandes partidos. De esta forma, el PSOE necesitará del voto a favor de los 'populares' para sacar el texto adelante, ya que se trata de una ley orgánica se requiere mayoría absoluta para su aprobación, una
posibilidad que desde filas socialistas se considera "muy difícil" teniendo en cuenta la posición del PP en la ponencia.
LEY ELECTORAL AUTONÓMICA
Además de la cuestión del agua, los 'populares' también querían que se cambiase la mayoría cualificada (dos tercios) que exige el texto para cualquier reforma electoral autonómica. La única enmienda sobre este extremo lleva la firma de IU, que quiere, como también defiende el PP, que baste la mayoría absoluta para cambiar la norma electoral castellano-manchega. Esa propuesta de IU no fue aceptada por el PSOE en la ponencia y la próxima semana la federación de izquierdas buscará apoyos para corregirlo.
El presidente de Castilla-La Mancha, José María Barreda, aseguró la semana pasada que se va suprimir ese "pretexto" sobre la ley electoral habida cuenta de que la "única forma" de que se apruebe el Estatuto de Autonomía de la región es con el apoyo del PP, pero a la vez dejó claro que el PSOE no puede "rebajar ni una sola cota" respecto a la reserva hídrica.
Mientras, desde el PP insisten en que mantiene intacta su voluntad de acuerdo, al tiempo que achacan al presidente de Castilla-La Mancha una posición "destructiva", según señaló hoy la portavoz del Grupo Popular en el Congreso, quien además garantizó que su partido "tendrá presente los intereses de todos los españoles" en este asunto, mientras desde las Comunidades de Valencia y Murcia se repiten los actos en defensa del mantenimiento del trasvase Tajo-Segura.
Ante esta situación, ya el pasado domingo, en un acto con jóvenes socialistas, el presidente de la Junta valoró por primera vez la hipótesis de que el PP no apoye el Estatuto y el texto tenga que volver a Castilla-La Mancha por falta de votos, advirtiendo que eso no significará "de ninguna manera" que el Gobierno regional "se relaje" en la lucha por defender una política hidrológica que atienda las necesidades presentes y futuras de la región. "Daremos la batalla cuenca a cuenca, río a río", remachó.
