TOLEDO, 11 Abr. (EUROPA PRESS) -
La consejera de Agricultura de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha, María Luisa Soriano, ha asegurado que, a pesar de la deuda que dejó el Gobierno socialista de más de 7,1 millones de euros correspondientes a todo el año 2010 y la parte correspondiente a 2011, "el Gobierno de María Dolores Cospedal se ha comprometido con los agricultores y ganaderos de la región apoyando de forma incondicional el sistema de seguros agrarios".
Soriano ha destacado que en ningún momento la Consejería de Agricultura ha eliminado la aportación autonómica a la contratación de pólizas, como así se comunicó a los miembros de la Comisión Territorial de Seguros Agrarios, ha informado la Junta en nota de prensa.
La Comisión está presidida por el director general de Agricultura y Ganadería, Tirso Yuste y constituida por organizaciones y agrarias, cooperativas, ENESA, Agroseguro, el Consorcio de Compensación de Seguros y el Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente, celebrada el pasado 21 de diciembre de 2011, y que se plasmó en las diferentes resoluciones publicadas en el Diario Oficial de Castilla-La Mancha, con fecha 30 de diciembre de 2011, 4 y 20 de enero de 2012.
En este sentido, Soriano ha manifestado que "uno de los compromisos del Gobierno es ofrecer a los castellano-manchegos una gestión más eficaz y transparente de los recursos públicos, apostando por una Administración que, en la medida de lo posible, impulse y no obstaculice los proyectos".
"Así lo haremos en el caso de los seguros agrarios, porque estamos convencidos de que este sistema de protección nos pone en línea con los modelos de gestión de riesgos más avanzados y es nuestra ambición estar en la cabecera del tren de las oportunidades", ha asegurado. La consejera de Agricultura ha señalado que "durante estos meses, hemos tenido ocasión de identificar y concretar aquellos puntos sobre los que se debe seguir trabajando, con el objetivo de perfeccionar la gestión de riesgos y el seguro agrario".
Por último, Soriano ha subrayado que desde la Consejería se sigue avanzando en la búsqueda de modelos e instrumentos que reduzcan los niveles de incertidumbre inherentes a la actividad agraria y "proporcionar así mejores y más satisfactorias condiciones de vida y de trabajo a los agricultores y ganaderos".
