CSI-F teme por la viabilidad futura del centro de Teletech en Toledo y por la totalidad de los puestos de trabajo

Actualizado: miércoles, 5 agosto 2009 14:18

TOLEDO, 5 Ago. (EUROPA PRESS) -

El sindicato CSI-F, representado en el Comité de Empresa de Teletech Toledo, teme por la viabilidad futura del centro y por la totalidad de los puestos de trabajo, tras la marcha de los acontecimientos en los últimos días.

En un comunicado, el sindicato afirma que la empresa norteamericana de telemarketing ha cumplido finalmente sus amenazas y hoy enviarán a 168 trabajadores los preavisos o cartas de despidos.

Con ello, según el sindicato, "se confirman los peores augurios y se abre un período muy preocupante para la viabilidad futura de los 800 trabajadores que realizan su labor en el centro de Telecomunicaciones de Vodafone España en Toledo".

"Tras el esfuerzo realizado por la central sindical independiente para conservar el empleo en la planta toledana y el inicial acuerdo alcanzado con la dirección, que confirmaba el mantenimiento de todos los puestos de trabajo y la cancelación de los 168 despidos, nos encontramos con la intervención de UGT, que apostaba por la aceptación de esa pérdida de empleo para no renunciar a la cancelación temporal del incentivo de productividad por un plazo máximo de un año".

Sometido a referéndum entre los trabajadores se resolvió desestimar el pacto conseguido, "aunque creemos que más por desinformación que por análisis riguroso de lo que se proponía".

La falta de coordinación sindical ha desembocado, finalmente, en la ejecución de los planes de la empresa, "que hoy comunica a 168 trabajadores su despido inmediato, lo que debería hacernos reflexionar sobre cual será la siguiente medida de la dirección, y si de nuevo volverá a encontrar un aliado inesperado en UGT para llevar a cabo sus planes, aunque ello suponga perjudicar a los trabajadores, que han depositado su confianza en los representantes sindicales".

Por eso, desde CSI-F "rechazamos categóricamente esos despidos, que podrían haberse evitado con un esfuerzo de la empresa", tal y como se había acordado, y con la solidaridad de todos, aceptando una apertura de franjas horarias de dos horas, que afectaría a un máximo del 15 por ciento de la plantilla, pero que habría evitado los despidos propuestos.

El Pacto de Estabilidad cerrado con la empresa fracasó por la intervención de UGT, "que desde CSI-F no alcanzamos a comprender cuando lo que estaba en juego eran 168 puestos de trabajo, que pueden ser la punta de lanza de nuevas propuestas de reducción de plantilla, con los riesgos que ello conllevaría para la estabilidad del empleo y la defensa de los derechos de todos los trabajadores, algo en lo que CSI-F nunca cejará, cumpliendo así con el mandato de sus representados".