CIUDAD REAL, 9 Sep. (EUROPA PRESS) -
Los ciudadanos rumanos, C.R. y N.C., padastro e hijastro, respectivamente, no han reconocido este martes el haber participado en una veintena de robos en casas de campo en la zona de Carrizosa y Villanueva de los Infantes en los primeros meses del año 2013.
El fiscal pide para cada uno de ellos ocho años de cárcel por los delitos de robo con fuerza en casa habitada y pertenencia a grupo criminal en el juicio que se ha iniciado este martes en la Sección Primera de la Audiencia de Ciudad Real.
El más joven de los acusados, N.C., ha negado que la noche en la que fue detenido por la Guardia Civil mientras transitaba por una carretera cerca de Carrizosa fuera a buscar al otro acusado, que, supuestamente, estaba robando en un cortijo cercano, en compañía de otra persona.
También ha rechazado que los objetos hallados en los registros domiciliarios --reconocidos por los propietarios de las casas robadas-- fueran el resultado de los robos, diciendo que se trataba de "cosas de la basura".
Alternativamente a la calificación primera, el Ministerio Público pide para cada uno de ellos cuatro años por el delito de robo con fuerza, dos años y medio por un delito continuado de receptación y un año y seis meses por integración en grupo criminal.
En concreto, los robos que se enjuician en este caso se cometieron en casas de campo de Carrizosa, el 12 de febrero de 2013, y en 19 viviendas rústicas del partido judicial de Villanueva de los Infantes, entre el 22 de febrero y el 4 de marzo del mismo año.
