El Gobierno recomienda usar "todos los espacios públicos" para acoger programas de ocio educativo este verano

El propósito de estas actividades es paliar las consecuencias educativas y económicas de la pandemia en la infancia más vulnerable

MADRID/TOLEDO, 5 Jun. (EUROPA PRESS) -

El Gobierno recomienda usar "todos los espacios públicos" posibles y con aforo suficiente para organizar este verano programas de ocio educativo dirigidos a los niños y jóvenes más vulnerables tras la crisis del coronavirus, como los que han sufrido la pérdida de ingresos familiares o han tenido problemas de conexión para seguir la educación a distancia durante el confinamiento.

Así figura en una guía elaborada por el Alto Comisionado contra la Pobreza Infantil, el Ministerio de Educación y Formación Profesional y el Ministerio de Derechos Sociales y Agenda 2030 con recomendaciones para el desarrollo de estos programas "imprescindibles para proteger del 'olvido veraniego' a la infancia más vulnerable".

Para facilitar el desarrollo de estos programas con las garantías sanitarias frente al coronavirus, la guía elaborada por el Gobierno aconseja a las administraciones públicas y entidades organizadoras que "estudien" la utilización de centros educativos, centros cívicos, bibliotecas públicas y "todos los espacios con aforo suficiente" para mantener distancias de seguridad y condiciones higiénicas.

El alto comisionado del Gobierno contra la pobreza infantil, Ernesto Gasco, alerta de "las consecuencias sin precedentes que la crisis de la COVID-19 tendrá en la infancia más vulnerable" para justificar la "necesidad de ofrecer programas estivales que palien esta situación", ya que tras la interrupción de las clases presenciales en marzo, los escolares podrían pasar seis meses sin pisar un aula hasta la vuelta al cole de septiembre.

Gasco recuerda que en España hay más de dos millones de niños y adolescentes en situación de pobreza. "Esta situación se ha visto agravada por las consecuencias de la COVID-19: el Alto Comisionado contra la Pobreza Infantil calcula que más de tres millones de niños se encuentran a cargo de personas que han sufrido mermas en sus ingresos, creando nuevas situaciones de necesidad", asegura.

La pandemia ha provocado en estas familias problemas de conciliación, y la nutrición de los jóvenes ha podido empeorar, apostilla el alto comisionado. Por ello, la guía elaborada por el Gobierno recomienda que los programas de ocio educativo en verano ofrezcan "el acceso a una alimentación saludable, que incluya, al menos, la comida principal y preferentemente una bolsa de desayuno o cena".

TRES A CINCO SEMANAS CON CINCO HORAS DIARIAS

También que tengan una duración de tres a cinco semanas con cinco horas diarias para, además de facilitar la conciliación de la vida familiar y laboral, asegurar "su efectividad pedagógica" en los escolares. En el plano educativo, la guía del Gobierno propone que estos programas estivales sirvan para "compensar la prolongada etapa sin docencia presencial, sin que esto suponga una merma del derecho al ocio y el esparcimiento".

"Dentro del refuerzo de competencias básicas, es recomendable el de competencias digitales para reducir la brecha existente en el uso de dispositivos, con un marcado carácter socioeconómico", se remarca en el documento, donde también se aconseja "incluir profesionales de psicología infantil para atender posibles casos de afecciones derivadas del confinamiento o agravadas por el mismo".

El pasado mes de abril, el Ministerio de Educación y las comunidades autónomas acordaron que los colegios puedan abrir este verano para ofrecer clases de refuerzo voluntarias a los estudiantes que han tenido problemas para seguir la educación a distancia durante el confinamiento por la pandemia del coronavirus.

Leer más acerca de: