Actualmente la producción de energía con fuentes renovables en C-LM podría dar servicio al 53% de la energía eléctrica consumida
TOLEDO, 25 Ene. (EUROPA PRESS) -
La consejera de Industria, Energía y Medio Ambiente, Paula Fernández, afirma que hasta la fecha se han inspeccionado aproximadamente el 73 por ciento de las plantas fotovoltaicas existentes en la región, es decir 294 de un total 408, en busca de irregularidades, habiéndose detectado incumplimientos de la legalidad vigente en cuatro de ellas.
En una entrevista concedida a Europa Press, Fernández apuntó que en estos momentos el Gobierno regional está terminando de inspeccionar este tipo de instalaciones en Castilla-La Mancha "porque no queremos que haya ninguna sombra de duda sobre un sector que consideramos estratégico para la región", agregó.
Asimismo, aclaró que el informe realizado por la Comisión Nacional de la Energía (CNE) en el que se afirmaba que había irregularidades en estas instalaciones de Castilla-La Mancha "no detectó nada que no hubieran detectado las inspecciones que desde el Gobierno regional se empezaron a poner en marcha en septiembre de 2008 y que se habían comunicado a dicha Comisión", apuntó.
"Creemos que es importante hacer las cosas bien y aunque no era preceptivo hacer estas inspecciones, las hemos querido hacer para despejar cualquier duda sobre un sector que para nosotros es prioritario que siga invirtiendo y creciendo en la Comunidad Autónoma", argumentó.
En este sentido, la titular de Energía, Industria y Medio Ambiente explicó que, una vez detectadas las irregularidades, han sido transmitidas a la CNE y al Ministerio de Industria, Turismo y Comercio "que son los órganos competentes para tomar las medidas oportunas", añadió.
MOVILIDAD SOSTENIBLE
De otro lado, Fernández indicó que la movilidad sostenible es una "apuesta importante" de su Consejería con el fin de compaginar el crecimiento económico y el desarrollo sin perjudicar al medio ambiente. Así, destacó que el Gobierno regional está trabajando con los ayuntamientos con el fin de que hagan planes de movilidad sostenible y en una línea directa de ayudas para la renovación del parque automovilístico de la región.
Concretamente, la consejera manifestó que con los ayuntamientos y los municipios de Castilla-La Mancha que están poniendo en marcha la Agenda 21 Local, se están subvencionando planes de investigación "para ver qué es lo que cada uno necesita en este sentido", agregó.
Asimismo, señaló que el Ejecutivo regional también ha publicado dos órdenes de ayuda para que el parque automovilístico pueda renovarse atendiendo a la compra de turismos híbridos y otro tipo de vehículos, como los camiones de transporte para empresas, que consuman gases licuados de petróleo, no quemen gasolina y emitan menos CO2 a la atmósfera.
ENERGÍAS RENOVABLES
De otro lado, la consejera de Industria, Energía y Medio Ambiente aseguró también que sigue creyendo en el objetivo de que en el 2012 el 100 por cien de la energía que se utilice en la región sea renovable y añadió que en estos momentos la producción de energía con fuentes renovables en Castilla-La Mancha podría dar servicio al 53 por ciento de la energía eléctrica consumida.
"Con las inversiones previstas de aquí al 2012, de 12.000 millones de euros, estamos en condiciones de afirmar que toda la energía eléctrica que se consuma en Castilla-La Mancha tendrá su producción equivalente en fuentes renovables", apostilló.
En este sentido, explicó que con la aprobación del Plan Estratégico de Energía de Castilla-La Mancha, que ya ha pasado por el Consejo Asesor de Medio Ambiente y está en el Consejo Consultivo, se pondrá en marcha el nuevo plan eólico, el fotovoltaico, el de la biomasa, el del hidrógeno y el de los combustibles.
"De alguna manera, estos planes van a permitir diseñar las políticas prioritarias para este Gobierno en instalaciones renovables que nos van a permitir alcanzar este objetivo en el 2012", sentenció.
Finalmente, dijo que su Consejería va "más allá" y quiere estar en línea con las políticas del Gobierno central y de la Unión Europea para reducir las emisiones de CO2 y contribuir a que se cumplan los objetivos de que en el 2020 el 20 por ciento de toda la energía, no sólo la eléctrica, se obtenga de fuentes no contaminantes y limpias.
