El martes se juzga en Ciudad Real al ciudadano rumano acusado de violación que tuvo que ser extraditado

Audiencia provincial de Ciudad Real
EUROPA PRESS
Actualizado: sábado, 12 mayo 2012 15:42

CIUDAD REAL, 12 EUROPA PRESS)

La Audiencia Provincial de Ciudad Real enjuiciará los próximos días 14 y 15 de mayo, tras haber tenido que suspenderlo en noviembre de 2011 por la huída de uno de los imputados y porque no compareció la víctima, el caso de dos hombres de nacionalidad rumana acusados de un delito de violación y otro en grado de tentativa en Fuente el Fresno.

En concreto, se dictó para el principal acusado, Floricel I. -a quien se le imputa la agresión sexual consumada-, una orden de busca y captura a finales del pasado mes de noviembre y finalmente la Policía lo localizó a mediados de febrero y lo extraditó desde Rumanía, por lo que desde el 1 de marzo está en la prisión de Soto del Real (Madrid).

El acusado compareció el pasado 7 de marzo ante la Sección Segunda de la Audiencia Provincial, responsable del juicio que se celebrará la próxima semana, y en una vistilla, que duró apenas unos minutos, el joven alegó que se había marchado a su país de origen a trabajar, situación en la que se econtraba cuando la orden de localización internacional dio resultado.

No obstante, en aquel momento el juez dictaminó que permaneciera en prisión para evitar la posibilidad de una nueva fuga, de forma que ya lleva algo más de un mes en la prisión madrileña.

HECHOS

Tras la reciente detención de Floricel I., está previsto que el próximo martes y miércoles se sienten tres personas de nacionalidad rumana en el banquillo de la Audiencia por su presunta implicación en la violación de una compatriota, ocurrida en Fuente el Fresno en julio de 2009, según el escrito de acusación de la Fiscalía al que ha tenido acceso Europa Press.

El principal acusado es Floricel I., para el que la fiscalía pide nueve años de prisión por un delito consumado de agresión sexual.

El segundo imputado es un amigo del primero, Marius Marian B., acusado también de intentar violar a la misma mujer, que logró huir de este segundo agresor, y la solicitud de condena es de tres años de cárcel.

La tercera acusada es mujer, Cornelia I., madre del principal acusado y jefa de la víctima, que trabajaba de camarera en el bar del centro del pueblo que llevaba Cornelia. A ella el ministerio fiscal la acusa de obstrucción a la justicia, porque intentó convencer a la víctima de que retirara la denuncia. En principio le ofreció "lo que quisiera" a cambio de no denunciar y al ver que la chica, que acudió a la Guardia Civil inmediatamente, se mantenía firme llegó a amenazarla.

Sucedió la madrugada del 20 de julio de 2009. La fiscalía sostiene que los hombres, que conocían a la joven por su trabajo en el bar de la madre, urdieron un plan para quedarse a solas con ella y violarla.