Reconoce la "insuficiencia financiera" de los ayuntamientos y anuncia propuestas para mejorar la gestión y la coordinación
Dice que el optimismo de Zapatero "no es por desconocimiento" sino para mantener la confianza transformadora
TOLEDO, 11 Jul. (EUROPA PRESS) -
El secretario general del PSOE de Castilla-La Mancha, José María Barreda, apeló hoy al "espíritu competitivo, combativo y de lucha para no dar por perdida ni una sola pelota", utilizando un símil deportivo para animar a los socialistas a no "confiarse" a pesar de haber "ganado porque somos mejores y hemos jugado mejor", porque, como precisó, "esto no ha hecho más que empezar".
Durante su intervención en el IX Congreso Regional del PSOE, Barreda reconoció que en Castilla-La Mancha "hemos avanzado mucho pero debemos y podemos avanzar mucho más. Es lo que todo el mundo espera de nosotros y es lo que vamos a hacer", porque "no ha acabado nuestra tarea de socialistas castellano-manchegos comprometidos con nuestra tierra y nuestros paisanos". "Queda mucha labor por delante y a ella os convoco", añadió.
Barreda cerró así el balance del informe de gestión del Comité Ejecutivo Regional, que inició recordando las victorias socialistas en las elecciones regionales y municipales, donde las urnas han dado al PSOE el poder pero no por sí mismo, sino "como palanca para conseguir más libertad, más igualdad, más fraternidad", una "trilogía revolucionaria siempre vigente", aseveró.
En este punto, vio "legítimo" valorar los propios resultados y preguntarse qué es lo que ha llevado a los ciudadanos a votar al PSOE, convencido de que "en democracia vence el que convence" y de que la diferencia fundamental con el Partido Popular estriba en la posición de unos y otros en relación a la desigualdad, que la derecha justifica y ve inevitable y al izquierda "combate con todas sus fuerzas".
Aseveró que el PSOE ya forma parte de la realidad de la región porque "somos como nuestros paisanos", comentario que aprovechó para recordar a todos los cargos socialistas presentes en el auditorio que "estamos para servir" y que "no se nos suben los cargos a la cabeza" porque "los ciudadanos son los que nos eligen y a los que nos debemos".
En este punto, precisó que en el PSOE --desde el de Pablo Iglesias hasta el de José Luis Rodríguez Zapatero-- se han hecho "muy bien los relevos", y ejemplo de ello es el que se produjo entre Bono y él mismo, haciendo "fácil lo que aparentemente es difícil" y suele ser un "momento conflictivo" como se demostró entre el ex presidente del PP, José María Aznar, y el líder actual del partido, Mariano Rajoy, en el Congreso del PP, donde "ni siquiera se hablaron".
Cifró en "mucho" y realizado "en muy poco tiempo" el cambio que ha experimentado Castilla-La Mancha, donde "estamos transformando radicalmente la sociedad", convenciendo a los ciudadanos porque "tenemos credibilidad", refiriéndose en este punto a algunos de los compromisos realizados y cumplidos en materia de mayores, discapacitados o sanidad.
NO MORIR DE ÉXITO
Defendió una estrategia de "bisturí" para "intervenir con eficacia en la sociedad", pero advirtió a los presentes en este punto de que "nuestro acierto será no morir de éxito", y les instó a "no caer en el inmovilismo complaciente de que todo tiene que cambiar menos nosotros" pues, a su juicio, sería una "paradoja" que "siendo impulsores del cambio nos quedásemos obsoletos o desfasados".
Barreda apostó por aplicar la "receta concreta de la cercanía" a la hora de abordar las dificultades y problemas de los ciudadanos, especialmente los derivados de las "dificultades económicas" que "sentimos como nuestras y tenemos como una prioridad", anunciando que van a hacer "todo lo que esté a nuestro alcance para afrontar juntos la crisis" y no defraudar a los ciudadanos, pues "no estamos al margen de la sociedad sino imbricados en ella".
Se apresuró a decir que el PSOE tiene "fortalezas" para superar los problemas actuales, y aseguró que el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero "es optimista y lleva razón al serlo". "Yo también quiero serlo, no porque no conozcamos la realidad sino para mantener la capacidad transformadora" necesaria para mantener la "confianza en que las cosas puedan mejorar".
TRASVASE INACEPTABLE
En materia hídrica, el secretario regional del PSOE lamentó que "mientras nosotros hacemos esfuerzos para evitar la sobreexplotación de nuestros acuíferos, otros mantienen una demanda permanente e ilimitada de agua con la que han organizado un crecimiento que no pueden mantener". "El trasvase Tajo-Segura es socialmente inaceptable y además genera tensiones territoriales", apostilló.
A su juicio, "no pueden reclamar permanentemente agua del Tajo, cuya cuenca les es ajena", mientras en zonas como la comarca de Hellín y el Segura "abren pozos para que el agua corra aguas abajo y la utilicen otros". "Esto no lo podemos aceptar", remachó Barreda, quien aludió al texto sobre agua aprobado en el 37 Congreso Federal del PSOE, en el que se recoge que Castilla-La Mancha pueda utilizar el agua.
De otro lado, abogó por la sociedad del conocimiento, el crecimiento económico y la competitividad como líneas estratégicas para "que nunca más nos quedemos en el anden", convencido de que "hemos dejado atrás, ya para siempre, el desierto de la resignación y el desierto del ir tirando, el fatalismo que reinaba en los pueblos que achacaba al destino el fracaso y el subdesarrollo, como si no tuviéramos capacidad de cambiarlo".
Barreda cerró su discurso agradeciendo a los ayuntamientos de la Comunidad Autónoma su apoyo y para ellos, y consciente de la "insuficiencia financiera" de las administraciones locales, adelantó que el próximo domingo, última jornada del Congreso, "haré propuestas para mejorar la gestión y para poder estar mejor coordinados". Sin embargo, matizó, "ahora fuerza y ayuda para no caer en el desánimo" porque "sin vosotros es imposible ganar las elecciones".
