Ejecutivo central, regional y Ayuntamiento sustituyen y construyen 150 nuevas viviendas por valor de 17,5 millones de euros
CIUDAD REAL, 29 Dic. (EUROPA PRESS) -
El ministro de Fomento, José Blanco, el presidente de Castilla-La Mancha, José María Barreda, y el alcalde de Alcázar de San Juan, José Fernando Sánchez Bódalo, han visitado las nuevas viviendas del complejo residencial Hermanos Laguna y han entregado, en el auditorio municipal, las primeras llaves de las mismas.
El ministro de Fomento ha defendido que con esta actuación, las tres administraciones, central, autonómica y local han hecho algo más que contar los días, "hemos hecho que los días cuenten, porque 150 familias tenían a toda España detrás".
Según ha informado en nota de prensa la Junta, de la misma manera Blanco ha asegurado que ayudar al que lo necesita es un acto de decencia personal y dignidad colectiva, que esta actuación es un ejemplo que debe servir de ejemplo a toda la sociedad y que una vez más se pone de manifiesto que la Democracia es la llave que abre oportunidades a los ciudadanos.
Por su parte, el presidente regional ha recordado tanto la apuesta del presidente José Luis Rodríguez Zapatero y la suya propia que, en mayo de 2007, no perdieron ni 24 horas en acudir al lugar de las inundaciones y adquirir un compromiso con los danificados, que hoy es una realidad tangible.
Mientras primer edil alcazareño ha agradecido el ingente trabajo que los técnicos del Ayuntamiento y de los gobiernos autonómicos y central habían hecho hasta que ha llegado este día. "Hoy es el día del éxito de todos y de aquellos que confiasteis en el presidente Zapatero y en el presidente Barreda".
DESTRUCCIÓN Y RENOVACIÓN
Los días 23 y 24 de mayo de 2007 se sucedieron unas fuertes tormentas de lluvia, granizo y viento que ocasionaron inundaciones, especialmente importantes en el municipio de Alcázar de San Juan, donde se inundaron diversas zonas del municipio y, en concreto, el barrio Hermanos Laguna.
El Gobierno de Castilla-La Mancha y el de la nación acordaron impulsar un proyecto de transformación en el barrio Hermanos Laguna para solucionar los problemas producidos en los bienes personales, en los equipamientos e infraestructuras, y en el tejido productivo.
Las viviendas de nueva construcción oscilan entre los 60 metros cuadrados de una vivienda de 2 dormitorios, pasando por los 80 metros cuadrados de las de 3 dormitorios, hasta los casi 90 metros cuadrados de las de 4 dormitorios.
El suelo destinado a la promoción de las nuevas 150 viviendas estaba conformado por 3 parcelas diferentes: una de ellas se había cedido anteriormente al Ayuntamiento por parte del Gobierno autonómico para uso del Servicio de Bomberos; otra de las parcelas era propiedad del Ejecutivo autonómico, estando adscrita al patrimonio de la Consejería de Ordenación de Territorio y Vivienda, y una tercera parcela se encontraba al sur de la finca inscrita a nombre del Ayuntamiento, y fue adquirida en 1971 por la cooperativa Jordana de Pozas.
El proyecto se desarrolla en el Polígono Residencial Alces, situado al borde del núcleo de población. Se trata de una zona urbana consolidada próxima a la zona de servicios públicos que se organizan a lo largo de la Avenida de la Constitución. El solar presenta fachadas a las calles General Benavent García, Juan Carlos I y Lorenzo Rivas.
Se proyectan cuatro bloques de 5 plantas (Baja+4) y dos sótanos destinados a garajes y trasteros. 80 viviendas poseen dos dormitorios, de las cuales 5 se encuentran adaptadas a PMR; 58 viviendas tienen 3 dormitorios; y 12 viviendas son de 4 dormitorios.
En la renovación del barrio Hermanos Laguna, el Ejecutivo central, el Gobierno de Castilla-La Mancha y el Ayuntamiento de Alcázar han acometido la sustitución y construcción de 150 nuevas viviendas con una inversión total de 17,5 millones de euros. Los habitantes de Hermanos Laguna disfrutarán de un barrio renovado y hogares dignos, más grandes, confortables, accesibles y eficientes energéticamente, con mejoras como ascensores y suelo radiante.
Las viviendas se han levantado en unos terrenos adecuados y a salvo de riesgos naturales, como las inundaciones que en ocasiones anteriores ocasionaron daños e incluso obligaron al desalojo de algunas casas, debido no sólo a las características constructivas de las viviendas sino a la urbanización del barrio. Según la orden ministerial que establece las condiciones, requisitos y procedimiento para la adjudicación de las viviendas, los beneficiarios disfrutarán de los nuevos hogares en el mismo régimen jurídico de ocupación que tenían en el momento del siniestro.
