Innova.-El responsable del estudio Eudragene confía en conocer este año las causas de reacciones adversas a medicamentos

Actualizado: domingo, 1 junio 2008 15:15

VALLADOLID, 1 Jun. (EUROPA PRESS) -

El director del Centro de Farmacovigilancia de Castilla y León y responsable del estudio Eudragene en España, Alfonso Carbajal, avanzó que probablemente antes de final de este año se conozcan los primeros resultados del proyecto, cuya finalidad es detectar posibles orígenes genéticos en las reacciones adversas de determinados pacientes hacia algunos medicamentos.

En declaraciones a Europa Press, Carbajal explicó que desde su inicio en 2003, este proyecto ha conseguido reunir más de 300 muestras de sangre de pacientes que han padecido alguna reacción adversa grave ante tratamientos médicos, una muestra "de un valor incalculable" en el ámbito de la investigación.

Carbajal explicó que de esta cifra, casi la mitad de muestras procede de casos españoles, "principalmente por el impulso desde la Universidad de Valladolid (UVA) --con cuatro personas implicadas-- y la Universidad de Barcelona, aunque colaboran centros de todo el sistema español de farmacovigilancia con el objetivo de averiguar "por qué hay pacientes que reaccionan bien a la medicina, otros no responden y unos pocos responden mal".

En este sentido, precisó que grupos de trabajo de toda Europa analizan en este estudio las causas de algunas reacciones "raras y graves", entre las que destacan seis: agranulocitosis (una enfermedad en la cual no existe el número suficiente de glóbulos blancos sanguíneos llamado granulocito), miopatías graves producidas por estatinas y fibratos, rotura tendinosas por un tipo de antibiótico a base de fluoroquinilonas, alteraciones del ritmo cardíaco por el síndrome del QT largo y alteraciones psiquiátricas por mefloquina y hepatopatías.

"De todas éstas no se puede decir cuál es la más habitual y todas son graves aunque hay mucho interés en investigar las hepatopatías. En esta labor colaboran varios grupos de Europa, aunque dos de los más activos son un grupo de la UVA y un grupo de la Universidad de Toulouse (Francia)", indicó.

Según indicó, el procedimiento que sigue el proyecto comienza con la identificación de los casos de interés en las bases de datos de los centros de farmacovigilancia. La relevancia de los casos se debe a que, a través de algún estudio previo, se conoce que estas reacciones adversas podrían deberse a algún motivo de tipo genético.

"Una vez que de ha identificado nos ponemos en contacto con los médicos que los han notificado y éstos a su vez con los pacientes. Si los pacientes dan su consentimiento, porque en todo momento deben estar informados, se les hace una pequeña encuesta sobre el problema que padecieron y se les recoge una muestra de sangre que se envía a un laboratorio para que la estudie", añadió.

En el momento que comienza este proceso, los pacientes suelen estar ya recuperados de sus enfermedades, aunque precisamente debido a la gravedad provocada por ese rechazo a los medicamentos les hace "generalmente" colaborar con el estudio, "que puede tener poca incidencia sobre ellos pero a lo mejor tiene interés para sus familiares por tratarse de un estudio genético", consideró Carbajal.

Este proyecto pretende crear un biobanco con información genética como medio para hacer estudios sobre las características genéticas de los pacientes, aunque el fin último es "identificar qué pacientes tienen problemas similares y qué relación hay con sus características genéticas".

Este estudio internacional está financiado por la Unión Europea desde sus orígenes con 1,1 millones de euros. En España, el Centro de Farmacovigilancia de Castilla y León actúa como espacio coordinador y junto a él participan otros 13 centros autonómicos de Farmacovigilancia.