Cientos de personas se concentran en La Cistérniga (Valladolid) en repulsa por la absolución del terrorista Martín Pon

Actualizado: domingo, 6 abril 2008 18:05


LA CISTÉRNIGA (VALLADOLID), 6 Abr. (EUROPA PRESS) -

Cientos de personas se concentraron hoy en la Plaza Mayor de La Cistérniga (Valladolid), localidad natal del policía nacional Javier Sanz Morales, en repulsa por la sentencia absolutoria que el Tribunal Supremo ha dictado a favor de su presunto asesino, Marcos Martín Ponce, tras la no comparecencia de la principal testigo.

En el acto, que comenzó en torno a las 14.50 horas de hoy, se guardaron cinco minutos de silencio en señal de respeto hacia la víctima y se leyó un emotivo comunicado elaborado por la asociación de vecinos del municipio, quienes se encargaron de montar un improvisado monolito adornado con una sábana blanca con la foto de la víctima, ramos de flores y velas dedicadas.

Entre los asistentes al acto se encontraban los padres de la víctima, así como uno de los hermanos mayores --el fallecido tenía cuatro-- y varias autoridades del municipio, quienes, al igual que los vecinos congregados en la Plaza, no pudieron reprimir las lágrimas.

La encargada de leer el comunicado fue la presidenta, hasta hace una semana, de la Asociación de Vecinos 'El Carmen' de La Cistérniga, Lourdes Noriega, quien envió a Javier Sanz Morales "una carta al cielo, donde se fue un 17 de noviembre de 2000".

Lourdes Morales recordó a la víctima como un joven "lleno de vida y de ilusiones", que no se fue "por su voluntad propia, sino que se fue por decisión de un asesino sin corazón".

Entre insultos de los asistentes dirigidos al terrorista, continuó el comunicado del pueblo, subrayando que "no baja la cabeza, mira de frente al asesino cobarde y se siente muy orgulloso" de Javier. Además, añadió que "en estos duros momentos" son como él fue, "fuertes y valientes", razón por la cual se encontraban allí, "pidiendo la divinidad que merece su memoria, su recuerdo, y la Justicia que un atajo de incompetentes, ineptos y miserables no le han dado".

Por ello, Lourdes Morales destacó que había "mucho dolor, indignación y rabia en la plaza", lugar donde la víctima "se crió y fue feliz". Sobre la familia de Javier aseguró que los vecinos tienen "mucho cariño y apoyo para darles, no están solos" y se mantendrán a su lado "para ayudarles a soportar ese terrible dolor".

Finalmente, concluyó la misiva aludiendo al recuerdo de Javier, por el que "mantendrán vivo" su dolor y pidieron a Dios que le de "la paz y la Justicia que le negaron los hombres".

Por su parte, uno de los hermanos mayores de la víctima, Miguel Ángel, también intervino en el acto en recuerdo de Javier, señalando que su única culpa fue "la de llevar orgulloso el traje de Policía". Además explicó que la esperanza de su esposa, padres y hermanos era "que el asesino fuera castigado por la ley", algo "que no había podido ser por una serie de extrañas circunstancias".

Miguel Ángel se mostró esperanzado en que esta situación "no se vuelva a producir y que los españoles puedan vivir pensando en que la ley castiga como se merece a los asesinos". Para terminar, recordó que aquellos que conocían a Javier podían dar fe "de su alegría de vivir y de su ayuda desinteresada" y, aunque "una bala traidora segó su vida", ante todo "fue un buen chico".

INDIGNACIÓN ENTRE LOS VECINOS.

Por su parte, uno de los vecinos se lamentó de que la Justicia en España anduviera "muy mal", al considerar que supone "una quiebra a nivel nacional, no funciona y nunca a funcionado", señaló. "Es un problemón de raíz, de la Democracia", añadió.

En este sentido, una joven que se encontraba encendiendo una vela en homenaje a la víctima, aseguró que si no había Justicia, a los criminales "se les da más pie para que delincan". Aunque no conocía personalmente a Javier, comentó que sí a sus familiares más directos, por lo que se encontraba "completamente indignada".

Las muestras de solidaridad en el pueblo desde el momento en que se conoció la noticia han sido innumerables, sobre todo entre las diversas asociaciones de vecinos. "Hay que mostrar la solidaridad con todas aquellas personas que se sientan víctimas de la mala Justicia", apuntó Isabel Fraile, de la Asociación de Pintura y Manualidades del municipio.

Al respecto, Isabel explicó además que le parecía "fatal" el fallo del Tribunal Supremo, ya que observa "cómo los malos están fuera y los demás tendrán que encerrarse, porque los criminales tienen más derechos que aquel que va haciendo el bien por la vida", aunque confesó mantener la esperanza de que "desde el Gobierno se pongan las pilas y se den cuenta de que los ciudadanos corren peligro".