La compañía Dromesko inaugurará Titirimundi con un montaje ambientado en una cantina que representa el mundo a escala

Actualizado: miércoles, 11 abril 2007 20:58

SEGOVIA, 11 Abr. (EUROPA PRESS) -

La compañía Dromesko inaugurará en mayo el Festival Internacional de Teatro de Títeres de Segovia (Titirimundi) con el montaje 'La Barraca' que, ambientado en una cantina bohemia, representa el mundo a escala y llama a la participación de los espectadores.

Según informaron a Europa Press fuentes de la compañía, la "veterana" y "singular" Compañía Dromesko, fundada por Benot Goñi, más conocido como Igor, junto con su compañera Christine Lavina --Lily-- y los hermanos Forman --los titiriteros Matej y Petr, hijos del cineasta Milos Forman--, presentarán un montaje espectacular "que rompe con la convención escénica para prometer al espectador vivir una experiencia teatral única".

'La Baraque' ('La Barraca'), representada desde hace once años por toda Europa y que en Segovia recalará en la Plaza de Toros de San Lorenzo, se desarrolla en una taberna de madera de cedro con unas diez ventanas y construida para la ocasión.

De sus paredes cuelgan cestos de mimbre llenos de cebollas y en ella hay una barra de bar, un estrado para los músicos y multitud de baúles y otros objetos distribuidos delicadamente, por lo que apenas caben 150 espectadores por función, sentados a los largo de 14 mesas de madera donde comparten una botella y toman sopa junto a los actores.

El objetivo dle montaje se centra en la estimulación de una relación especial entre artista y público. "Tres o cuatro horas ininterrumpidas de teatro, circo, títeres, música, danza, comida y bebida donde una orquesta zíngara es el hilo conductor, mientras las marionetas de los Hermanos Forman, de seis tamaños distintos, cobran vida en esta cantina bohemia que tiene el encanto de lo antiguo", señalaron las mismas fuentes.

Algunos perros pululan por el lugar, un prestidigitador recorre las mesas amenizando al espectador con sus trucos, diminutas marionetas aparecen de repente en las ventanas reproduciendo lo que ocurre en la sala, un gran carro de madera muestra un pequeño espectáculo de títeres y, más tarde, otro carro aún mayor rompe una pantalla de cine para emerger con otra pieza, esta vez, de marionetas de hilo.

'La Barraca' no cuenta con un guión predeterminado pero sí con un amplio margen para la improvisación, el humor y la ironía en el que participan artistas checos, eslavos, húngaros y franceses que se unen al público para pasar una noche con canciones, bailes y títeres alrededor de un mantel.

"Se trata de una singular concepción del espectáculo que entronca con la vida y se sirve de la música, la danza, la canción y el teatro como principales vehículos expresivos para encontrar la filosofía verdadera de la existencia", apuntaron las mismas fuentes.