Condenado en Valladolid a 9 años por apuñalar a otro en la calle Caamaño, pese a ser exculpado por la víctima

Actualizado: domingo, 6 junio 2010 14:00

VALLADOLID, 6 Jun. (EUROPA PRESS) -

La Audiencia de Valladolid condenó a una pena de nueve años de cárcel por delito de homicidio en grado de tentativa a Primitivo G.R, tras considerar probado que el día 29 de julio de 2005, en compañía de su cuñado, José Luis C.C, este último ya condenado en 2006 a siete años por estos mismos hechos, asestó una puñalada a un joven, Iván V.P., durante una reyerta registrada en la calle Caamaño, y eso a pesar de que el propio lesionado y los amigos de éste negaron que quien ocupaba el banquillo participara en la refriega.

La condena coincide con la solicitada por el Ministerio Fiscal durante el juicio celebrado el pasado día 11 de mayo e incluye, en concepto de responsabilidad civil, el pago de una indemnización de 11.000 euros en favor del herido en concepto de lesiones y secuelas y de otros 4.484 euros a Sacyl por los gastos derivados de la asistencia hospitalaria prestada a la víctima, según informaron a Europa Press fuentes jurídicas.

Lo llamativo del caso es que en el juicio tanto el herido como los amigos de éste aseguraron no reconocer al ahora condenado, quien, sin embargo, desde el día del apuñalamiento permanecía prófugo de la Justicia para evitar tener que responder por estos hechos. Además, y también como detalle que no favoreció los intereses del acusado, nada más iniciarse el juicio, sin siquiera dar tiempo al presidente de la Sala para que le leyera sus derechos, 'Tivo', como así se le conoce, anunció su propósito de no responder a pregunta alguna y de mantener su boca cerrada.

De este modo, la Sala pasó a escuchar la versión del apuñalado, Iván V.P, quien, también de forma sorprendente, antes de sentarse para empezar a responder a las preguntas del fiscal entró ya en la sala anticipando cuál sería su postura. "¡Yo a este señor no le conozco de nada, no fue el que me apuñaló!", espetó el testigo, quien ya más tarde durante el interrogatorio no fue capaz de explicar por qué en su día reconoció en distintas a fotografías a Primitivo G.R, alias 'Tivo', como la persona que casi le quita la vida.

"¡No sé cómo pude decir eso, al ver hoy al acusado me he quedado un tanto paralizado porque yo creía que el autor era más bajito y más joven", insistió Iván V.P, quien siguió jurando, en algunos momentos de malas formas y con nerviosismo, que no había visto en su vida a quien ocupaba el banquillo.

En idénticos términos se expresaron, uno tras otro, cuatro amigos del herido que presenciaron los hechos pero que, al igual que el anterior, rechazaron identificar al acusado como el autor de la grave puñalada.

Todos ellos aseguraron en su día, tanto a la policía como en sede judicial, que un tal 'Tivo', cuñado de José Luis CC, ya condenado en solitario por estos mismos hechos en 2006, asestó a su amigo la segunda herida de arma blanca, la más grave, si bien durante el juicio se desdijeron y, pese que a que alguno de ellos estuvo a menos de metro y medio de la agresión, aseguraron no ser capaces de identificar al autor del navajazo.

NIEGAN AMENAZAS.

Ante el cambio experimentado en la versión de todos los jóvenes, tanto el fiscal como más tarde el presidente de la Sala llegaron a interpelar, sin éxito, a cada uno de ellos sobre si ello obedecía a que habían recibido amenazas de alguien del entorno familiar del procesado.

Incluso negó tal extremo Laura V.A, una de las amigas del herido que días antes del juicio, según desveló el magistrado presidente, se había puesto en contacto telefónico con la Audiencia Provincial para pedir que no le hicieran declarar porque tenía miedo. Ella, sin embargo, precisó que llamó a la Sección Cuarta de lo Penal para solicitar la instalación de un biombo al objeto de no tenerse que enfrentar al acusado.

Ante ello, y frente a la petición absolutoria de la defensa por, en su opinión, "falta de prueba de cargo suficiente y bastante capaz de desvirtuar la presunción de inocencia de su patrocinado", el Ministerio Fiscal mantuvo invariable su petición de pena de nueve años de cárcel y el pago de indemnizaciones por importe global de casi 15.000 euros, 11.000 de ellos para el herido, al considerar que la puñalada "fue asestada con el ánimo de matar".

Y es que la acusación pública fundamentó tal afirmación en el informe forense, según el cual la puñalada atribuida al acusado era "mortal de necesidad de no haber recibido auxilio médico inmediato", ya que la hoja del arma llegó a penetrar 10 ó 12 centímetros en la región mamilar derecha y afectó a la pared torácica, lóbulo inferior derecho pulmonar, pericardio y, en dos puntos, a la aurícula derecha.

Los hechos, tal y como considera probados la Sala, se produjeron sobre las 21.30 horas del día 20 de junio de 2005, fecha en la que el lesionado, Iván V.P, se encontraba junto a varios amigos en el 'Poblado de Fasa', en el barrio de Delicias, cuando un coche negro, tras dar varias vueltas por la zona, se acercó hasta el lugar y se bajaron del mismo dos personas, el citado José Luis C.C, ya condenado, y su cuñado, Primitivo G.R, alias 'Tivo'.

Fue entonces cuando José Luis C.C. preguntó por su ex novia y por un joven apodado 'Ichi' con quien ésta supuestamente mantenía una relación y al que dijo que iba a matar, amenaza que hizo extensiva al grupo de personas que se encontraban en el lugar.

En ese momento, la víctima, Iván V.P, recriminó a José Luis C.C. las amenazas y el primero sacó una navaja de grandes dimensiones con la que trató de agredir al joven en al menos dos ocasiones, hasta que finalmente le hirió en la axila, aunque logró salir corriendo.

Entonces, otro individuo que acompañaba al agresor, Primitivo G.R, se bajó del coche, cerró el paso a Iván V.P. y le asestó otra puñalada en el costado que le provocó heridas muy graves de las que fue atendido en el Hospital Clínico Universitario.