El domingo se clausura en Valladolid la exposición de objetos personales, fotografías y periódicos de la época Azaña

Actualizado: viernes, 17 marzo 2006 20:10

VALLADOLID, 17 Mar. (EUROPA PRESS) -

Mañana se clausurá en la sala de la Casa Revilla de Valladolid la exposición "Manuel Azaña y la II República", una muestra sobre una de las principales figuras más emblemáticas de la II República Española que fue inaugurada el pasado 22 de febrero.

La exposición muestra una serie de fotografías ordenadas cronológicamente sobre la vida de Manuel Azaña y su actividad política durante la II República. Comienza con fotos de su infancia (nació el 10 de enero 1880 en Alcalá de Henares) y finaliza con su entierro en Montauban (Francia) en noviembre de 1940.

Como documentos personales del que fuera Presidente de la II República se cuenta con parte del legado del secretario particular de Azaña, Santos Martínez Saura, como cartas manuscritas, textos de 'Mi rebelión en Barcelona', libros, fotografías, caricaturas y una de sus plumas estilográficas de nácar, todo ello cedido por la Asociación Manuel Azaña e Izquierda Republicana.

Sin ser abundantes los objetos originales que se muestran sobre Azaña, reflejan en parte el sentir de un intelectual de su época, un político a veces calumniado, vilipendiado y atacado en varios libros y publicaciones de su tiempo.

También se exponen documentos guardados en el exilio, como los abanicos propagandísticos de Izquierda Republicana de Galán y García Hernández, militares que fueron ejecutados en diciembre de 1930; un libro de las Cortes constituyentes con los diputados elegidos; fotos de la esposa del político, Dolores Rivas; una cartilla de lectura del Ejército popular, o el telegrama del presidente del Comité Ejecutivo de la URSS, señor Kalinine, saludando al pueblo español, y la respuesta manuscrita de Azaña al pueblo soviético. Igualmente se muestran varios ejemplares de periódicos de la época.

Varios fragmentos de discursos pronunciados por Azaña, entre ellos el de Barcelona -conocido por las tres pes, de Paz, Piedad y Perdón- rezan en las paredes de la sala a modo de recordatorio del verbo utilizado por los intelectuales de la política de la II República.

La exposición no obvió el trato dado a Manuel Azaña por algunas revistas satíricas de la época, como La Traca o Gracia y Justicia aunque en las vitrinas se pueden contemplar ediciones de libros de Azaña como las Memorias políticas y de la guerra; Retrato de un desconocido, de Cipriano de Rivas; Los que le llamábamos don Manuel, de Josefina Carabias, o Azaña, el Gobierno, de Francisco Villanueva, director de El Liberal, de Madrid.

Asimismo, la muestra acoge la única grabación sonora que se conserva de Manuel Azaña, de 35 escasos segundos, en que el presidente español se dirige a su homólogo francés, Edouard Herriot, en una visita de éste a España en 1933. Se podrán contemplar también los preparativos del famoso mitin del Campo de Comillas (Madrid), al que acudieron más de medio millón de personas a escuchar el verbo de Azaña.