SEGOVIA, 19 Mar. (EUROPA PRESS) -
Dos matrimonios se repartirán el premio de más de 764.000 euros que el sorteo de la Bonoloto celebrado anoche dejó en Segovia, según confirmaron a Europa Press fuentes de la Administración de Lotería número siete de la capital segoviana, que validó el boleto ganador.
Según explicaron en la administración, los agraciados se gastaron tres euros en un boleto que fue realizado automáticamente por la terminal de apuestas. Aunque no quiso desvelar su identidad, el propietario de la Administración de Loterías señaló que son clientes habituales que suelen sellar sus boletos para distintos sorteos en este establecimiento.
La suerte está siendo generosa con Segovia en 2008, ya que el pasado mes de febrero, el día 15, el sorteo de la ONCE dejó en Segovia un premio de 9.430.000 euros correspondiente al número 48.176, en el que recayó el primer premio y que fue distribuido por un vendedor que suele trabajar en el centro de la capital segoviana.
Se da la circunstancia de que uno de los cupones fue agraciado con el premio especial de seis millones de euros, mientras los más de 90 restantes repartidos por este trabajador de la ONCE fueron premiados con 36.000 euros cada uno.
Además, en enero la Lotería Nacional dejó en la capital hasta en dos ocasiones, lo que supuso un total de 780.000 euros. El sábado 12 de enero tocó en Segovia capital la cantidad de 300.000 euros gracias al número 26.351, en el que recayó el tercer premio del Sorteo especial de enero, que estuvo muy repartido y también se vendió en Zaragoza y las localidades de Ingenio y Santa Lucía de Tirajana, en Las Palmas.
La suerte la repartió la administración número doce de la capital, situada en el centro comercial Luz de Castilla, que vendió seis series completas del 26.351, es decir 60 décimos, con un premio de 5.000 euros por décimo.
El sábado 26 de enero, el segundo premio del Sorteo de la Lotería Nacional, que recayó en el número 33.788, dejaba en Segovia 480.000 euros, correspondientes a cuatro series, mientras las seis series restantes fueron consignadas en una administración de Barcelona.
