La Fiscalía pide 18 años para el presunto asesino de una joven de 17 años que murió al caer de un balcón en Ávila

Actualizado: lunes, 2 marzo 2009 20:58

ÁVILA, 2 Mar. (EUROPA PRESS) -

La Fiscalía pide 18 años de cárcel para M.D.S.G.R. por el presunto asesinato de su compañera sentimental, P.M.M., una joven de 17 años que murió al caer por el balcón de su casa en Ávila capital en 2005. La acusación particular solicita para él 20 años de cárcel y la defensa, que sostiene que se suicidó, la absolución.

Fue en septiembre de 2005 cuando se produjeron los hechos, sobre los que tendrá que emitir su veredicto un jurado popular. La vista se prolongará hasta el jueves y tendrán que declarar 72 testigos.

El acusado está, por otra parte, cumpliendo condena por malos tratos en la cárcel de Villanubla (Valladolid) por haber propinado varias palizas a la joven, pero no está en prisión preventiva por los hechos que se juzgan.

La joven murió al caer de un balcón al patio interior y su cuerpo fue encontrado junto a un bote de lentejas y ropa interior todavía con las pinzas, tal y como atestiguaron hoy en el juicio los agentes que llegaron hasta el lugar.

La caída le produjo un politraumatismo generalizado, con fractura en la base del cráneo, que le ocasionó la muerte instantánea, y en un principio se pensó que podría tratarse de un suicidio, aunque después, al entrar en la casa, se observó que podría haber sido empujada, al comprobar que había signos de violencia en el domicilio. Así, por ejemplo, la cocina y la terraza de la que cayó estaban llenas de lentejas esparcidas, todavía líquidas, y sobre ellas una huella que se corresponde con las deportivas que el acusado calzaba ese día.

Fue, además, el propio acusado --entonces tenía 33 años-- el que dio aviso a la Policía Local de que su novia no le dejaba entrar en casa y que temía que si hubiera suicidado, dos minutos después de que un vecino llamara al 091 alertando de que había un cadáver en el patio interior del edificio y también un grupo de pelotaris que se alojaban en el hotel de al lado.

En su declaración en el juicio, el acusado negó hoy, sin embargo, que estuviera en el domicilio aquella noche. Dijo que habían estado toda la noche bebiendo y que ella estaba muy nerviosa porque la habían despedido del trabajo, y que le pidió las llaves para irse a casa porque "quería estar sola".

Afirmó, en este sentido, que él pasó la noche en el parque de San Antonio y que, tras ir en varias ocasiones hasta la casa y llamar al portero, avisó a la Policía porque "estaba harto de que los vecinos avisaran a la Policía porque Patricia se ponía muy nerviosa y empezaba a dar voces" y porque "no quería problemas", recordando también que un mes antes la joven había intentado suicidarse.