Heras advierte de la posibilidad de que algunos pueblos de Soria queden sin televisión analógica ni digital

Actualizado: lunes, 26 mayo 2008 18:06

SORIA, 26 May. (EUROPA PRESS) -

El presidente de la Diputación de Soria, Domingo Heras, advirtió hoy en la capital de la posibilidad de que algunos pueblos de la provincia, una vez se produzca el apagón analógico previsto para el 23 de julio de este año, no reciban ni la señal convencional de ni la digital, de forma que no puedan ver la televisión.

El responsable expresó sus dudas respecto a la viabilidad del proyecto en la totalidad del territorio de la provincia, y es que el proyecto 'Soria TDT', promovido por el Gobierno central, sólo recoge cobertura para una parte de Soria, la de aquellos municipios que reciben la señal del repetidor de Santa Ana.

El máximo dirigente provincial se refirió así al anuncio realizado el pasado 20 de mayo por el ministro de Industria, Turismo y Comercio, Miguel Sebastián, quien dio a conocer la fecha prevista para el apagón analógico en Soria, el 23 de julio, con dos años de antelación respecto al resto del territorio nacional.

Heras lamentó que no se haya tenido en cuenta a la Diputación a la hora de programar este proyecto, al igual que ha ocurrido con otros casos, "siempre tenemos que acabar asumiendo iniciativas que comienzan otros porque sino acaban en saco roto".

El presidente de la Diputación hacía referencia con estas palabras, además de a la implantación de la TDT, al mantenimiento de los 107 telecentros con que cuenta la provincia, que se pusieron en marcha entre 2004 y 2006 en virtud del programa 'Internet Rural', gestionado por la entidad pública 'Red.es', en colaboración con la institución provincial y los ministerios de Agricultura y Ciencia y Tecnología.

El programa establecía que Red.es asumía parte de los gastos de funcionamiento de los telecentros durante tres años, y posteriormente se desvincularía del proyecto, sin embargo, el año pasado, la Diputación tuvo que asumir los gastos de 34 de estos centros.

Esto representa, según Heras, un ejemplo "del compromiso de algunas instituciones, siendo la Diputación después la que tiene que hacerse cargo del mantenimiento de los proyectos".