Los hijos del acusado de matar a su esposa en Zamora intentan agredirle y retrasan el inicio del juicio

Actualizado: martes, 6 abril 2010 20:01

La acusación particular pide penas que suman 24 años de prisión, seis más que el fiscal, mientras que la defensa solicita tres

ZAMORA, 6 Abr. (EUROPA PRESS) -

El juicio contra J.D.M., de 44 años de edad, acusado de acuchillar hasta la muerte a su esposa M.J.O. en su domicilio familiar del barrio de Pinilla se retrasó hoy tras el intento de agresión que protagonizaron los hijos de la pareja en los pasillos de la Audiencia Provincial de Zamora, donde se inició la vista oral por los hechos ocurridos en mayo de 2008.

La vista comenzó con retraso debido al intento de agresión que los familiares de la víctima protagonizaron en los pasillos de la Audiencia Provincial. Visiblemente nerviosos, los hijos de la fallecida primero amenazaron a los testigos de la defensa para después intentar agredir a su propio padre, que esposado y custodiado por agentes de Policía Nacional, tuvo que refugiarse en un pasillo hasta que las fuerzas de seguridad pudieron garantizar su integridad.

Inicialmente, la Fiscalía pide para el homicida confeso de M.J.O. una pena de 15 años de prisión por homicidio y tres más por maltrato y amenazas. Por su parte, la acusación particular pide 20 años de prisión por asesinato, tres por maltrato y uno más por amenazas, mientras que la defensa pide tres años de prisión.

Una vez comenzada la vista oral, el acusado se negó a prestar declaración a las preguntas formuladas por los cinco letrados presentes en la sala. J.D.M. rehusó contestar a los interrogantes planteados por el fiscal, los abogados del Estado y la Junta, la acusación particular y los personados en representación de las Asociación Clara Campoamor.

El homicida confeso sí que respondió, aunque escuetamente, a las preguntas de su abogado. De esta forma, contestó con un rotundo "nunca" haber maltratado a su esposa, negó también que entre ellos hubiera una relación de afecto y confirmó haber sido objeto de una agresión por parte de sus hijos en los pasillos del Juzgado.

Tras la declaración del acusado, prestaron testimonio los agentes de policía que descubrieron el cuerpo de la víctima. Los funcionarios confirmaron que fueron los padres del homicida los que avisaron de la agresión protagonizada por su hijo y ambos vieron la maleta a medias de hacer que la víctima parecía tener preparada para abandonar el domicilio familiar.

También prestó declaración el médico que atendió al acusado en los calabozos minutos después de entregarse. El facultativo confirmó que se encontró a un hombre presa de un estado de ansiedad y mudo debido probablemente a la presión del momento.

AMENAZAS Y CONTINUAS DISCUSIONES.

A continuación, declararon los dos hijos mayores de edad del matrimonio, quienes hicieron mención a las continuas discusiones protagonizadas por sus padres y confirmaron las amenazas de las que era objeto la víctima.

El hijo del acusado, D.M, destacó el carácter agresivo de su padre y el hecho de que su madre "siempre terminaba llorando" y confirmó que su madre tenía la maleta hecha porque pretendía abandonar su casa, algo que no era la primera vez que hacía.

D.M, que pidió una orden de alejamiento de su padre tras el homicidio, admitió sentir "algo de odio" por su progenitor, aunque negó la existencia de agresiones previas a este suceso o que el acusado fuera alcohólico.

La hija de J.D.M. incidió durante su testimonio en las frecuentes amenazas de las que era objeto su madre. "Te voy a tirar por la ventana" o "te voy a matar" eran algunas de las expresiones utilizadas por el agresor para amedrentar a su esposa, según M.M.

El matrimonio discutía por todo, confirmó su hija, quien entre los temas más recurrentes destacó la obsesión de su padre por su estado de salud. "Creía que tenía un cáncer", señaló M.M, que también confesó tener hacia su padre un sentimiento de "rabia" y "puede que de odio".

La primera jornada de ese juicio terminó antes de lo previsto dado que uno de los testigos propuestos por la defensa del acusado no pudo prestar declaración al sufrir un ataque de nervios y ser trasladada a un centro médico.

Para la jornada de mañana está prevista la continuación de la vista oral, con la declaración de los forenses que practicaron la autopsia y de los psiquiatras que analizaron la personalidad del homicida confeso, así como las calificaciones definitivas de las partes.